Aquí escribo,
al filo de la noche,
en este cuaderno de cristal
y humo,
para ahuyentar las sombras.


Con la ventana abierta,
por si viene el pájaro
del sueño.

AMB







viernes, 13 de febrero de 2009

Respuesta a Cristal



Por el título de esta entrada parece como si se tratara de un debate entre intelectuales, columnistas o algo parecido, pero nada que ver. Es simplemente que la amiga Cristal (conocida como Cristalook), tuvo a bien hace unos días escribir un interesante comentario en mi entrada de "El lema de Nietzsche", al cual debía una respuesta. Y como ésta me parece aclarar ciertos puntos de mi escrito que quedaban algo oscuros, he decidido ponerla aquí como complemento a esa entrada.
No he incluido el comentario de Cristal porque es suyo, personal, y no le he pedido permiso para hacerlo, pero está publicado en la sección de comentarios de dicho tema.
La verdad es que durante estos días he estado dándole vueltas a la idea de escribir una segunda entrada, que sirviera de aclaración a ese "lema". Por un lado, apuntar que el escrito no estaba dedicado especialmente a Nietzsche, sino que venía a ser como una metáfora de la trivialidad que, visto a grandes rasgos, nos rodea. Y por otro, hacer una defensa del solitario Nietzsche, al que admiro y aprecio, a pesar de que su pensamiento y su forma de ver la vida me quedan bastante lejos.
Tenía ya el borrador casi terminado, pero no me decidía a ponerlo en limpio, porque sentía que no era yo nadie, ni éste el sitio, para defender al señor Nietzsche, que, además, sabe muy bien defenderse solo.
Y en esto vino el jugoso comentario de Cristal, el cual aprovecho ahora para dar por zanjado el asunto. Gracias, Cristal.

... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ...


Hola, Cristal. How are you?

Iba a contestar a tu sustancioso comentario como se merece, pero he recibido una notificación de Blogger avisándome de que queda poco espacio, que si era mi deseo podían habilitar un blog anexo que se podría llamar "comentarios del cuaderno nocturno". Aún así, me voy a permitir tres o cuatro cositas...
En primer lugar, te recuerdo el rechazo de nuestro mutuo amigo Hesse por las clasificaciones y las etiquetas. En su "Klingsor" lo explica bien claro. Así que si viera tu juicio hacia él como "existencialista místico" o "nihilista perfecto", imagino que se limitaría a sonreir burlonamente moviendo la cabeza... Aunque, desde luego, eso no quita para que tu juicio sea, de alguna forma, acertado.
Recuerdo que Ziolkowski se atrevió a aventurar, refiriéndose a Hesse, categorías como "existencialista romántico" o "romántico existencial", pero dejando claro en seguida que ni lo uno ni lo otro, que sí a ambas cosas pero también a lo contrario; dando a entender que el único rótulo que le cabía a la obra de Hesse era el de "hessiana". Y esto creo que vale también para Nietzsche.

El resto de tu comentario es toda una confesión, lo cual te agradezco. Y me atrevo a decirte lo siguiente: creo que eres dura contigo misma si defines a esa superficialidad como "pecado".
Si has leído mis anteriores respuestas, habrás visto que digo que a veces hay que cargar las tintas para llamar la atención, y eso es lo que he hecho en ese texto de 'el lema de Nietzsche'. Por supuesto que las cosas no son ni deben ser exactamente como las describo.
Una reunión de amigos hablando de filosofías es uno de los placeres que más aprecio. No somos semidioses, tampoco héroes, pero tenemos el don de la palabra (más o menos).
Cuando te he leído eso de que "todas las palabras se las lleva el viento", me he levantado a mirar mis libros y no, siguen ahí, afortunadamente. ¡Qué susto!
Pero yo no me refería a ese tipo de reuniones amistosas en las que se habla de todo, "de lo divino y lo humano", como dices, y en las que a veces pueden brillar joyas inesperadas, sino a otro tipo de reuniones, de otra clase de gente, que lo único que quiere es brillar por fuera sin tener nada dentro.
Es a esa gente "superficial" hasta el tuétano a la que yo contrapongo la del pensador solitario y auténtico que mantiene su vela encendida en medio de la noche.

Como digo, no somos semidioses y no podemos, por mucho que queramos, dar gusto a ese "tirano interior" o a ese duro amigo que nos acompaña, pero sí podemos llegar a ser héroes, tan sólo con evitar en la medida de nuestras fuerzas la tiranía de la mediocridad.
Aparte de esto, a todos nos gusta jugar, y cantar y bailar, para divertirnos y reír. Pero creo que siempre debemos ser conscientes de que es un juego, una farsa, una pantomima; siempre debemos saber que hay un sitio dentro nuestro que está a salvo. Y si no es así, es que algo no va bien.
Ese es el sitio donde se encuentra el solitario, el que no está de fiesta.
Todo, insisto, son imágenes 'cargadas', exageradas si quieres, pero es mi forma de expresarlo, para que se vea con claridad el contraste. Podría decir lo mismo de una manera abstracta, que quizá se acercaría mucho más a la multiplicidad de lo real, pero sólo sacaría con ello dolor de cabeza, aparte de confusión.

Gracias por el apelativo de "gótico" con que me obsequias. Si es lo que imagino, me siento halagado.
No sé si esta respuesta ha dejado algo en claro, pero quiero pensar que al menos en parte sí.

Un abrazo.


AC. (13 de febrero, 2009)

24 comentarios:

  1. Amigo Antonio, ando algo abrumada por tu atención. Incluso me he sobresaltado un tanto, cuando he visto el título de tu entrada, aunque me tranquilizases casi de inmediato línea a línea, con el resultado de esta media sonrisa que ahora mismo me alumbra. A veces, de verdad que sin quererlo, resulto polémica y la lío parda, total "pa ná"...
    Me alegra mucho que no sea el caso.
    Pero este medio, con ser libérrimo en muchos sentidos, limita en algunas ocasiones. Hablar sobre ésto, se merecería un vis a vis de horas fuera del alcance de Bloguer. Pero, ésto, es lo que hay. Y si te digo la verdad, he borrado varias veces ya, lo escrito... y todo lo que pueda escribir será sólo un "breve"(jejeje)un pálido reflejo de lo que pienso... tal como te ocurre a tí. Y a todos.
    No sé cuando, pero prometo hacer una entrada al respecto... Queda en mi cuenta del "debe" para contigo, por el momento.
    En todo caso algo te diré con respecto a ésta y la otra entrada. Después de mucho borrar, finalmente, he decidido ir a la "fuente" a lo que nos va a poner de acuerdo sin duda alguna.
    Mi ejemplar de "El Lobo Estepario" data de los 70 y tantos y se cae a trozos, literalmente, y está más subrayado(tengo esa costumbre) que cualquier otro libro, incluyendo los de texto, que haya tenido... Y cuando lo abro, al azar, siempre se abre por la misma página, de tan leida...
    Antes de transcribir a Hesse decir que también me reconozco en algunos de los pensamientos de Nietzsche, (como tantos) pero me queda lejos, igual que a ti. Y a esto, añadirle que quien realmente me identifica es el Haller de Hesse, en el que también te reconozco alguna vez. Sobre todo en esa entrada.

    Dice tu tío Hermann:

    Que el hombre, no es de ninguna manera un producto firme y duradero (este fue, a pesar de los presentimientos contrapuestos de los sabios, el ideal de la Antiguedad) el hombre es más bien un ensayo y una transición. No es otra cosa sino el puente estrecho y peligroso entre la naturaleza y el espíritu. Hacia el espíritu lo impulsa la determinación más íntima, hacia la naturaleza, en retorno a la madre, lo atrae el más íntimo deseo : entre ambos poderes vacila su vida temblando de miedo...
    A simple vista, deja poco margen el amigo Hesse... es ahí donde le veo viajando del existencialismo al nihilismo...
    Y en esa duplicidad lobo-hombre, que nos persigue para bien y para mal... (instinto-razón) identifico a ese "tirano interior" mucho más vulnerable y cercano a mí que el del amigo Nietzsche.
    Sólo en una cosa disiento de lo que dices. Y es cuando te refieres a la mediocridad, está bien y es loable cualquier intento de huir de ella... pero en la mayoría de ocasiones, por más intentos que hagamos... siempre nos acaba atrapando. También se muere de éxito... Supongo que a eso es a lo que te refieres cuando dices que hay gente que "brilla por fuera sin tener nada dentro"
    En fín, Antonio, esto vuelve a estar largo de cohone... y no he dicho ni la mitad de lo que quería...
    Un abrazo, de los de verdad y gracias por el obsequio de tan exquisita respuesta.

    P.D. Casi me abochorna la extensión de este comentario.

    ResponderEliminar
  2. Creo que Bloguer, se ha cabreado de verdad, la verificación de palabras de este comentario es "ressum" jajaja!

    ResponderEliminar
  3. Escribir es maravilloso, pero creo que sufre carencias , las gesticulaciones, los tonos de voz, o el poder mirar a los ojos, nos roba información, a veces incluso contexto,y siempre la réplica inmediata...pero, también he de decir que, en la escritura,dices cosas que no dirías,y puedes retractarte con el pulsar de un simple dedo, escoges mejor las palabras...Dicen que: "a buen entendedor, sobran las palabras",pero es que, por ejemplo, yo,a veces no soy muy buena entendedora, el darle sentido a algo es muy personal, lo que oigo o leo, lo mezclo con lo que pienso o recuerdo y la amalgama puede ser tremenda!
    ¿Que a qué viene esto? no sé, supongo que hago referencia al placer insustituible de mantener una conversación, cara a cara; y a la vez, a la caprichosa bendición, de que a través de la escritura, podamos explorar un mundo virtual, en el cual nos cruzamos con personas maravillosas.

    ResponderEliminar
  4. A veces, lo que se pudiera considerar como ser solitario, es más, el hecho que no te llega a interesar demasiado lo que te rodea, creo que para una buena tertulia como la que hablas, siempre se está dispuesto, y para determinados encuentros literarios, o peliculas que merezcan la pena, el teatro, etc...fuera hay muchas cosas pero cuando no las tenemos asiduamente al alcance de la mano, preferimos estar solos y llenarnos de nosotros mismos, o con nosotros mismos, haciendo cosas que nos gustan realmente, es decir, no perdemos el tiempo por hacer vida social ya que ésta nos puede aburrir, y más si hay que soportar la doxa (cotilleos, superficialidades....)
    Por esta actitud no se es raro, solitario, si, pero con motivo.
    En fin, no sé si me he explicado bien.
    Besos

    ResponderEliminar
  5. Perdona, Cristal.
    Tenía que haberte avisado, y pensé hacerlo, pero entre tantos comentarios como tienes en tu última entrada creí que no lo ibas a ver. Imagino tu primera impresión al leer el título: "¿Y yo qué he hecho?..." Jeje, a mí me hubiera pasado lo mismo si hubiese leído 'Respuesta a AC.' Pero, como ves, es una respuesta normal, sólo que en cinemascope.
    Me gusta eso de "esta media sonrisa que ahora mismo me alumbra". Hasta me ha parecido verla.
    ¿Por qué tanto borrar? ¿Tan diferente era lo escrito en primer lugar? ¿O es que era muy grande y te salías de la página? :)

    Tu ejemplar de 'El Lobo Estepario' se cae a trozos, pues te diré que el mío directamente se convirtió en polvo y tuve que comprarme otro en el 85. Y es que no se puede ir a todas partes con un frágil libro de bolsillo; al final se hace 'uno' con el bolsillo...

    A ver, me pones una cita de Hesse, que me suena pertenece al Tractat, en donde una mano anónima (quizá uno de los Inmortales) escribe sobre la tensión entre los dos polos "naturaleza-espíritu", tema recurrente en Hesse a lo largo y ancho de toda su obra. Recuerda, por ejemplo, su "Narciso y Goldmundo". Lo que no entiendo es por qué identificas esos polos como 'existencialismo-nihilismo'... ¿Si estás del lado de la vida natural e instintiva eres existencialista, y si lo haces del lado del espíritu eres nihilista? No veo la relación. Pero, claro, habría que saber en primer lugar qué entiendes tú bajo esos términos. Porque son conceptos muy 'flexibles', sobre todo el primero.
    No vamos a convertir esto en una charla sobre filosofía, pero estaría bien aclarar esos términos.
    De entrada te confieso que de filosofía 'oficial' yo sé muy poco, casi nada.
    Y otra cosa que no entiendo es lo que dices sobre la mediocridad. Ten en cuenta que aunque el texto que leo sea el resultado de varios borradores, no deja de estar escrito a vuelapluma, por no ser el sitio más adecuado para plasmar un pensamiento. Sin embargo, yo me encuentro ante un texto 'acabado', fijo e inamovible, al que puedo mirar con atención, deteniéndome en cada palabra como un 'Sherlock Holmes' cualquiera, con mi lupa correspondiente. Esa es la ventaja del lector con respecto al autor.
    Y me encuentro con que dices "disentir" de mi referencia a la mediocridad. Es, por un lado, "loable cualquier intento de huir de ella", dices, pero por otro es inútil porque "siempre nos acaba atrapando"... ¿Dónde está la disensión?
    ¿Te refieres a cuando digo que podríamos ser héroes sólo con intentar evitar su tiranía? ¿Vienes a expresar con ello que no debemos intentarlo, sólo porque es imposible?
    Ten en cuenta, amiga Cristal, que lo que convierte a alguien en héroe no es ganar una batalla, sino luchar contra viento y marea, aún a sabiendas de lo inútil de su esfuerzo. ¿Recuerdas la escena entre Héctor y Aquiles?

    Bueno, Cristal, lo dejo de momento aquí, porque está empezando a salir un humillo sospechoso de debajo del teclado.

    Un abrazo, amiga.

    (¿Continuará?...)

    ResponderEliminar
  6. Hola, Leal.

    Intento escribir lo más natural posible, casi como si tuviera delante a mi interlocutor. Evidentemente, hay cosas como los gestos o la inflexión de las palabras habladas que se escapa. Por ello, quizá para mi próxima entrada utilice una 'web-cam'.

    De todas formas, constato y confirmo que esto del lenguaje escrito es una maravilla. Un puente casi mágico que nos permite expresar y comunicar desde la distancia.

    Un saludo, con gesto de sonrisa.

    :)

    ResponderEliminar
  7. Sí, Amparo, te has explicado bien.
    Hay momentos para estar en sociedad y momentos para la soledad, y eso no nos convierte ni en raros ni en vulgares.

    En mi caso siempre he sido más dado a la soledad, pero es sólo porque no he encontrado la coyuntura apropiada.
    Eso sí, a la "doxa" le tengo alergia.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  8. Bueno, como la mañana es solea, me he sentado al lado de Hermann Hesse, no sin antes darle los buenos días y, mirando ambos sobre el horizonte,vemos como Cristal y Antonio navegan con sus veleros, estando la dirección de los vientos definida en los puntos cardinales, cada cual gobierna sus velas con la fuerza sabia de su inteligencia y, ambos disfrutan sintiendo las caricias de la brisa en sus rostros. Hermann, ¿a que hora estaba lista esa paella?

    Saludos para ambos.

    ResponderEliminar
  9. Me encanta meditar, hace unos años aprendí y creo que es algo que deberían enseñarnos en el colegio de niños! Tu mente se silencia, y consigues conectar con una parte de ti...que te aporta paz.
    En los malos momentos se convirtió en mi faro, cuando me sentía a la deriva, sin rumbo, siendo lo único que conseguía transportarme a la orilla para sentirme a salvo, y lo considero una bendición, porque siento que tengo un paraíso, en el que cobijarme cuando me asalta la inquietud. A veces, me vienen imágenes, como sueños, cargados de emociones, como si lo estuviera experimentando, otras me vienen mensajes, en forma de pensamiento, de una forma concisa, lleno de serenidad, que me transmite esa paz de la que comentaba al principio, paz que me envuelve, aún habiendo finalizado la meditación, es como una sensación de estar a salvo, como si caminaras por la vida de la mano de una gran protección, emanada desde el interior.
    Hace unos meses tuve una mala experiencia, no de las peores que pueda sufrir el ser humano, porque nadie murió, pero de esas que sientes que el corazón te quedará resentido para siempre, o por lo menos, por largo tiempo; y haciendo balance, por lo infeliz que me sentía y lo inmensamente feliz que ahora me siento, sentí que mi alma se alegraba de que yo, con todos mis miedos, dudas, y resentimientos, apostara por volver a abrir mi corazón,arriesgándome a que pudiera volver a sufrir, no le privé de la opción de volver a ser feliz.
    Con el tiempo entendí, que las cosas son, o pasan , como tienen que pasar, para dar lugar a otras, mucho mejores.
    He pensado qe era muy escueto decir: "Mi alma y yo" ;)

    ResponderEliminar
  10. Gracias, Leal.
    Has contestado a mi pregunta, y de paso me explicas las maravillas de tu forma de meditar.
    Algún día quizá me atreva a describir la mía.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  11. ¡Terry!
    ¿Qué haces ahí con mi tío Hermann? Podíais haberme llamado, jejeje.
    Me cuesta imaginarle comiendo paella, pero seguro que le gusta.
    ¡Guardarme un plato, por favor!

    Un saludazo, amigo, y que tengas buen domingo.

    ResponderEliminar
  12. Por cierto, Leal, se me olvidaba añadir que si no me he atrevido hasta ahora es porque es bastante complejo.
    Lo que tú llamas "meditar" lo defines tú misma muy bien con estas palabras: "Tu mente se silencia, y consigues conectar con una parte de tí... que te aporta paz".
    Pero no es eso lo que yo entiendo por meditar.
    Lo que tú haces es algo muy bueno, que ayuda a encontrar estabilidad y sosiego. Pero la meditación, según la entiendo, es otra cosa.

    Siento dejarte con la duda, aunque puede que ya sepas lo que quiero decir, pero en su momento lo explicaré.

    Otro abrazo, de paz.

    ResponderEliminar
  13. Como a Cristal la instaban a resumir yo resumo:
    ¡Sois geniales los dos!

    ResponderEliminar
  14. Estimado Antonio:

    Pues la verdad es que el título de la entrada no me dio idea de hasta qué punto era un debate entre intelectuales de los buenos, no de los de élite, de los que parece distanciarse Cristal. El caso, es que para los que peleamos con todas nuestras fuerzas por mantener a raya la tiranía de la mediocridad, tu respuesta a Cristal es como tener la oportunidad de asistir a una de esas reuniones entre amigos para hablar sobre filosofías. Hoy, me conformo con escuchar y me perdonaréis que no pueda aportar mas que mi deleite. La mediocridad tiene la mala costumbre de pillarme completamente exhausta a estas horas y la combato al menos leyendo cuadernos como el tuyo. Por cierto que se me acumulan tus entradas y los deseos de leerlas. Me remití al "lema de Niestsche" para leer el comentario de Cristal y bueno...! que ha sido un placer asistir a ambas respuestas.
    Hesse es un amigo que hace tiempo tenía olvidado. Gracias por traerlo de nuevo a mi vida.
    Saludos y siento no poder leer por el momento a tus comentaristas. Siempre digo que los textos se engrandecen con otras miradas.

    ResponderEliminar
  15. Se dice que mas se aprende escuchando yo digo mas se aprende leyendo y tu debate con Cristal es para felicitaros
    Besos pasivos desde mi atolón
    .

    ResponderEliminar
  16. Gracias, Bruja.
    Más que "geniales", como dices, yo creo que somos dos geniecillos amigos.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  17. Sí, Media Luna, es lo que tiene la mediocridad, que cansa mucho. Aunque al principio se acerca muy zalamera y con promesas 'comodonas', al final nos deja hechos unos zorros.
    Yo, cuando la veo venir, que no siempre, la espanto a tortazos.

    Aunque, releyendo tu comentario, puede que te refieras al cansancio provocado por el trabajo cotidiano, que nos obliga a relajarnos al volver a casa y a no hacer nada fuera de lo normal...
    Sí, también de eso se aprovecha la mediocridad.

    Me alegro mucho de haberte hecho recordar a Hesse.
    Y tienes mucha razón en eso de que los textos se engrandecen con otras miradas. De hecho, incluso, muchas veces el verdadero interés de un texto está en los comentarios que vienen después.
    A mí, por lo menos, me hacen pensar más y escribir el doble. Y disfruto mucho con ello.
    Primero se pinta el cuadro, luego se expone y más tarde uno comenta en la galería con los visitantes, de lo se aprende mucho, y algunas veces hasta ve uno cosas en su cuadro que antes no veía. Todo ello tiene un nombre: riqueza.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  18. Muchas gracias, Mar, por tus palabras y por tu beso pasivo.

    Lo que me mosquea un poco es que Cristal está muy callada... ¿Qué estará cocinando?
    Y ejjjjjjqueeeeeeee Cristal es mucha Cristal, y cuando la lía, la lía parda, total pa'ná... Jajajaja.

    Son palabras suyas.

    Un beso activo, Mar.

    ResponderEliminar
  19. Não responde Cristal, respondo eu que também sou António... Vou seguir o interessante debate.
    Abraço.
    António

    ResponderEliminar
  20. Muy ocupada es lo que ando... amigo Antonio. Pero prometo contestar "ad hoc" en breve.
    Abrazos

    ResponderEliminar
  21. Llevo días enfrascada en un tema laboral, que me tiene más absorbida de lo que quisiera. Me conecto poco, y sólo con intención de “desengrasar”. Es decir, leer picando aquí o allí para comentar breve y ligerito. Algo de todo punto imposible en este cuaderno, donde aún a vuelapluma, el hacerlo, implica, atención, concentración y… extensión… muuuucha extensión. ¡Y que se joda blogger! jajaja
    Hoy, he sacado un “ratillo” entre reunión y reunión y aquí me tienes de nuevo amigo Antonio. Y te diré, que francamente, nunca pensé que este pseudo-debate tan lejano a temas mundanos e intereses crematísticos de cualquier índole, fuese a despertar el interés, que veo ha evocado en bastantes de tus comentaristas. De verdad, estoy asombrada. Y aunque en un pasado lejano fui amante de controversias similares, años ha, que por motivos diversos (como mi pesimismo endógeno y otros) abandoné esas prácticas. Ése, fue uno de los motivos por los que dudé en comentarte y dejé mi comentario días más tarde en la entrada de Nietzsche… No obstante, nunca rehuyo un buen debate (mi tirano interior me lo impide) o de perdidos al río… No sé… Sobre todo cuando la otra parte aporta tan buenas ideas y le rige tan buen ánimo. No soporto a los “list@s”…
    Primero dejar muy claro, que siempre, ever forever and ever, leo todos los comentarios de mi blogg y absolutamente ninguno me pasa desapercibido. Y que sigo encantada con tu respuesta en forma de Post. Y desde aquí, y a ti, te doy permiso para utilizar, cualquiera de mis textos, susceptibles de tu interés. De nuevo, gracias sinceras por tu atención. También, que supones bien mis motivos para borrar varias veces… la extensión no era de recibo…
    Decir de nuevo que es difícil, sólo por este medio, dar a conocer la opinión que nos merecen personalidades de la talla y complejidad de Hesse o Nietzsche. Y que se puede empezar hablando de churras, y acabar por hacerlo de merinas… como habrás comprobado…
    Imagínate, si el profesor Ziolkowski ha necesitado toda una tesis y varios libros al respecto, no será esta simple “aficionada” la que pueda aclarar cuestiones de esa enjundia. Sólo puedo dar mi opinión, que sin falsas modestias de ninguna clase, siempre resultará pobre, escasa y se prestará a confusión.

    Así pues y sin más :

    La cita, es en efecto del Tractat, y hace referencia –tal como dices- a ese tema tan recurrente en Hesse de la polaridad Naturaleza- Espíritu. Pero es que toda su álgebra simbólica, el agua, el Buda, el Teatro mágico, el río, los Inmortales, el Juego de abalorios, la idea de la Virgen o la Madre Universal, etc… está imbuida de esa dualidad. Va en busca –siempre y sólo en mi opinión- de una ética y de unos valores que armonicen lo espiritual con lo mundano. La mediocridad, o la trivialidad con la profundidad y lo auténtico. -A eso me refiero cuando digo que “aparentemente” deja poco margen...- pero en realidad, en esa lucha permanente está lejos del moralismo del Dios ha muerto de Nietzsche. Hesse, por el contrario, busca en el “otro” una complementaridad que nos falta. Hay un culto a la amistad subyacente en toda su obra… Una posibilidad de “salvación” que no veo en el amigo Friederich -Tu mismo citas un buen ejemplo con el Klingsor- Aunque también en toda su obra de una forma u otra siempre flota el fantasma del pesimismo y la muerte, planteada siempre en forma de suicidio… prácticamente en todos sus personajes. –es ahí donde le veo viajando del existencialismo al nihilismo- En el fondo, y si utilizamos un lenguaje “común” un romántico solitario que roza el misticismo. Al fin y al cabo, el romanticismo, en sus cotas más elevadas, no deja de ser una especie de misticismo.
    Apuntas, que sería interesante saber que entiendo por existencialismo y por nihilismo. Tampoco yo soy una experta en el tema, es probable incluso, que me acerque de forma muy abierta y descarada a la filosofía, quizás demasiado a mi aire. Y no sería extraño que cualquier “intelectual” se llevase las manos a la cabeza con mis interpretaciones del tema. Pero te diré lo que entiendo por ambos conceptos.
    En cuanto al primero, creo andar más cerca de Sartre que de Heidegger. El existencialismo, no es más que un nihilismo positivo (o perfecto) en el sentido “Sartriano”. Somos nosotros los que creamos los valores con nuestras acciones individuales (algo muy contemplado en la mística Oriental, tan cercana a Hesse y a Buda). ”Todos y cada uno somos el resto del mundo”. Y aunque el contenido de la moral sea variable, según las culturas, no deja de haber una cierta “Moral Universal” que nos incumbe a todos. Pero es “algo” siempre gestado desde la libertad y no desde una moral establecida. Lo que no deja de ser una afirmación de la ambigüedad y el relativismo.
    Y en cuanto al Nihilismo, todos, Nietzsche, Ciorán etc… comen de la misma mano… del padre de todos los “pesimistas” Schopenhauer… La vida siempre acaba en dolor e irracionalidad…. No existe la esperanza, ni la utopía… Dios ha muerto. Hay una crítica a todo lo establecido, parta de donde parta, religión, política… familia … convenciones sociales etc… que están también en el origen del existencialismo.
    Para mí, como ves, andan cercanos ambos pensamientos. Y creo que tío Hermann también lo cree… Pero creer es tan sólo un acto de fe. Algo lejano a ambas filosofías, o no… Tengo una clara tendencia al Sofismo, lo sé.
    En cuanto a la mediocridad, tienes razón, realmente me expliqué fatal.
    A ver:
    Digo que es loable huir (huir no es combatir) de ella, en un sentido ideal. Porque pienso que es un empeño inútil… como querer escapar de la lluvia, siempre hay un día en que nos atrapa. Sólo unos cuantos escogidos están fuera de su alcance, el resto, el común de los mortales, deberíamos aprender a vivir con ella sin más. Para mí, ése, es el único heroísmo, aceptar las propias limitaciones. Te diría incluso que el concepto de “heroísmo” me resulta un tanto sospechoso. No me gustan los héroes. No creo en fomentar ningún tipo de élites. Pienso como una de tus comentaristas, mi buena amiga Gárgola… (que bien resume la jodía) dice:
    “Hace falta una gran humildad para reconocer lo poco que hemos llegado a saber y lo mucho que jamás sabremos. Los filósofos, (los héroes, los intelectuales) a veces se exceden en la soberbia. Si fuéramos constantemente profundos y coherentes. Ahí sí que nos enfermaríamos”
    En cuanto a luchar contra viento y marea a sabiendas de que no se va a ganar la batalla… pues mira, es una opción… pero me parece igual de válido y valiente lo contrario. Tan sabio me parece el que lucha por su vida, como el que decide (sus motivos tendrá) dejar de hacerlo… Al fin y al cabo tanto Héctor como Aquiles tuvieron el mismo fin… que tendremos todos. Ya te advertí en mi primer comentario, que mi naturaleza cavilosa, no me lleva hacia la “esperanza” precisamente…
    A esto me refería cuando dije que disentía, en cuanto al tema de la mediocridad. Supongo, que cada uno defiende el lugar donde se instala ¿verdad?. Está bien hablar, debatir, polemizar etc… como un “divertimento” que no es poco… pero como la canción, sólo son parole, parole, parole… ya sabes, “total, paná”. Por eso, sigo creyendo que se las lleva el viento, por más escritas que anden amigo mío. Todo tipo de discusiones, por más elevadas que nos parezcan, y más placer que nos proporcionen, acaban por ser igual de baldías que la disertación sobre la “decoración del jardín” que te citaba en mi primer comentario.
    Bueno, espero haber dado respuesta y haber aportado algo más de claridad a tus dudas con respecto a mi comentario. Aunque seguro que con tu lupa encontrarás de nuevo mi inevitable torpeza.
    En todo caso, todo un placer utilizar las palabras, por más que se las lleve el viento, para comunicarme de nuevo contigo.
    Un abrazo Antonio.

    ResponderEliminar
  22. jajajaja! san Blogger Ora por nobis!
    Desde aquí gracias a todos tus comentaristas que han prestado su atención y su interés a mis comentarios.
    Un saludo a todos.

    ResponderEliminar
  23. Hola, Antonio Tapadinhas.
    Gracias por tu visita y tu saludo, pero esto no es ningún debate sino sólo una convesación amistosa, aunque, eso sí, interesante.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  24. Amiga Cristal, me siento muy honrado de que hayas elegido mi humilde cuaderno para dar a conocer tu nuevo libro.
    Es toda una primicia y me siento orgulloso de verla aquí.
    Este resumen del primer capítulo, denso y dinámico a un tiempo, dice mucho del resto del libro, el cual estoy deseando ver publicado, para degustarlo y devorarlo.
    De momento, leeré con atención el texto que nos brindas y más adelante te comentaré, porque seguro que hay algo que comentar.

    ¿Cómo me dijiste que se iba a titular el libro? Ah, ya me acuerdo: "Cristalia". Me gusta.

    Un abrazo, y mi más sincera enhorabuena; tu libro promete...

    ResponderEliminar