Siempre que veo la impresionante imagen de este monasterio de Mont Saint Michel, con su apariencia de castillo de cuento, mi mente, amiga de fantasías, vuela incontrolada y se le ocurre imaginar que allí está la sede de un hipotético gobierno mundial, una comunidad de nobles sabios, encargada de llevar las riendas de la humanidad.
No pasa de ser, obviamente, una descabellada fantasía, impracticable y utópica en este caótico presente, pero me agrada mucho imaginarlo.
AHM
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- Mont Saint Michel
- Mike Oldfield
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(el motivo inspirador de esta entrada está en la nueva música que el amigo Terry ha puesto en su blog de "La vida es una quijotada", en la que está incluido este tema)
Me alegra tu temprana visita, y que te hayan gustado imágenes y música. Ha sido sólo un capricho, pero me apetecía ponerlo, para eso que dices, para soñar un poco.
Por soñar que no quede, pero no veo yo al mundo avanzar hacia esa utopía, pero para eso son las utopías... La música y el castillo...una delicia para este día lluvioso. Un abrazo.
Hola, Esther. Yo al mundo es que no lo veo, vamos, que prefiero no mirarlo. Aunque es inevitable que se cuele su triste y gris imagen. Soñar es como un bálsamo, un alivio, inútil hacia fuera pero bueno para los adentros.
Yo he estado allí y es fantástico, lástima que esté tan orientado al turismo. Parece que te trasladaras a otra época. Además, a la salida el atardecer era espectacular. Muy bonito el vídeo y la música.
Espero que pueda cumplirse.... Porque ya es hora de que la humanidad pueda confiar en la sabiduria_nobleza...... Queremos cambiar quién nos gobierna, y debemos de volver a creer en las formas de gobiernos ancestrales... Lástima que sea fantasía... Pero sí me apunto a ello.... Sobre Mike Oldfield, no me repetiré...
Querido Antonio Antes que nada, te quiero agradecer tu invitación para visitar tu blog personal. Me ha encantado. Para empezar, me llegó muy hondo ver este cuadro de Kaspar David Friedrich, pintor del romanticismo alemán con quien me identifico bastante. Luego, cuando vi que mencionabas a Hermann Hesse, me sentí emocionada, pues es uno de mis personajes favoritos de todos los tiempos; yo lo considero no sólo un extraordinario escritor, sino casi casi mi gurú en esta vida. Me agradaron todas las imágenes y la música, el formato de la Página... en una palabra: toda la atmósfera que rodea a los textos seleccionados.
Por otra parte, me parece bueno y oportuno que cites a Nietzsche. Siempre es bueno parar nuestro carro y reflexionar sobre este tipo de cuestiones. Siendo pintora de vocación, quiero decir que mi tirano interior toda la vida me ha empujado a plantarme delante de una hoja de papel o una tela y explayar mis sentimientos con pinceles, lápices o pluma. Más que asistir a tertulias con buena mesa , buena bebida y pláticas ligeras, (aunque no niego que lo hago de vez en cuando) mi impulso interior es más bien el de pasarme horas y horas en solitario ante mi caballete, mi restirador o mi escritorio, enfrentando retos creativos. En los últimos tiempos, se ha ampliado la lista de mis herramientas básicas: mi computadora se ha convertido en un medio importante de estudio, expresión y comunicación, especialmente cuando del otro lado de la pantalla encuentro a seres como tú: inteligente, sensible, culto y profundo.
También he mirado someramente a quienes te acompañan en tu Página, y puedo decir que me han agradado mucho todos...espero irlos conociendo mejor con el tiempo.
Antonio, me alegra haber sido inspirador de esta entrada tuya, agradeciéndote nuevamente que pronuncies mi nombre. Añadiré que algunos seres humanos siguen soñando porque quizás la realidad, sea un río que pasa de largo y veamos desde nuestra ventana.
Las utopías siempre son impracticables, en el momento presente, pero quizá lo que hoy es fantasía mañana sea realidad. De los nobles sabios dirigiendo las riendas del mundo no digo nada, me asusta un poco esa imagen. Buenas noches.
Espero que el gobierno del mundo, bastante malo, no resida en un castillo de cuentos de hadas, ya no se podría confiar ni en la magia, o, que lo haga, sí, mucho mejor,y responda a nuestros sueños :)
¿Desde niña? Pues ¿a qué esperas, amiga? Normandía no está tan lejos. Plantéate ir allí este mismo año, en vacaciones. No puedes dejar que ese sueño tuyo espere más tiempo.
Muy bien, Carmine. Seguro que tu comentario anima a la amiga Lena, que está deseando ir. Lo del turismo es inevitable en cualquier lugar. Como no nos vayamos a un desierto... E incluso allí nos encontraríamos con algún puesto de refrescos, entre duna y duna, que además vendería banderitas y otros souvenirs.
¡Amiga Liz! ¡Mi pintora preferida! ¡Qué bueno verte por aquí!
Muchas gracias por tu amable comentario, aunque opino que exageras en lo que a mí respecta... Entre "inteligente, sensible, culto y profundo", me quedo sólo con lo de sensible. Lo demás me viene muy grande.
Sí, por aquí viene muy buena gente, ya lo irás comprobando, porque espero y deseo que vuelvas a menudo.
¡Un abrazo, amiga, desde el para tí lejano Madrid!
Ya lo sé, Alfaro, pero quería recalcar ese hecho, ese lamentable hecho. En cuanto a los sabios, te aseguro que a todos me los imaginé muy buenos, sabios de cuento, de un amable cuento...
El gobierno que imaginé en mi ensoñación no era malo, sino todo lo contrario. Soñar no cuesta nada, y tampoco sirve para nada, excepto para hacernos felices durante esos momentos.
Saludos Antonio. El lugar es hermosísimo y realmente es un lugar “encantado”. Hace casi treinta años,- bendita la senectud- pasé unos días por la zona de Saint Malo y el Mont Saint Michel; llegué con gran ilusión pero salí cabreado. El lugar, repito, es de ensueño. Pero las calles son extremadamente angostas y estrechas, abarrotadas de tiendas de souvenirs y de todo tipo de turismo en masa. Recuerdo que era en Marzo, es decir no era expresamente “temporada alta”, pero estaba impracticable. La belleza y la espiritualidad eran sistemáticamente sepultadas por los transeúntes. Me niego a imaginar terminantemente como está aquello ahora, en un mes de Agosto. Es decir, elijo verlo desde lejos, como en el clip que nos has brindado y fabular como era aquello, en el año mil.
No, amiga Bruja, no he tenido aún la suerte de estar allí. Y con los años cada vez viajo menos, así que... Pero con la imaginación sí que he estado. Lo de pernoctar allí me recuerda al escritor inglés Paul Brunton, especialista en yoga y temas similares, que consiguió un permiso, a principios del siglo XX, para pasar la noche dentro de la Gran Pirámide. Por supuesto, según cuenta, fue toda una experiencia mística. Si tienes interés, lo narra en su libro El Egipto Secreto.
Lo que imaginaba: lugar encantado invadido por el turismo. Me pasó algo parecido, salvando las distancias, cuando visité Santillana del Mar, precioso pueblo cántabro que conserva su sabor medieval, pero que también está invadido por lo mismo. No me molestaba la cantidad de gente, sino la calidad. Aquellas personas se paseaban por allí como si estuvieran en un parque de atracciones. Pero, en fin, nos queda el poder del ensueño. Creo recordar que estuve en esa ciudadela por el año MXII. Y aún conservo un pedacito de espada...
Fantástico tu castillo,tus sabios..y tus hermosas palabras.
ResponderEliminarImagino por un momento,la paz mundial...e imagino ese castillo.
Saludos
Soñemos...
ResponderEliminarBellas imágines y bella música para acompañar esta mañana de lluvia...
Un abrazo
Hola, Luisa, y bienvenida.
ResponderEliminarGracias por compartir mi fantasía.
He intentado entrar en "A donde se guardan... los pensamientos", pero me dicen que no estoy invitado.
Un saludo.
Hola, amiga Luisa A.
ResponderEliminarMe alegra tu temprana visita, y que te hayan gustado imágenes y música.
Ha sido sólo un capricho, pero me apetecía ponerlo, para eso que dices, para soñar un poco.
Un abrazo.
Por soñar que no quede, pero no veo yo al mundo avanzar hacia esa utopía, pero para eso son las utopías...
ResponderEliminarLa música y el castillo...una delicia para este día lluvioso.
Un abrazo.
Hola, Esther.
ResponderEliminarYo al mundo es que no lo veo, vamos, que prefiero no mirarlo. Aunque es inevitable que se cuele su triste y gris imagen.
Soñar es como un bálsamo, un alivio, inútil hacia fuera pero bueno para los adentros.
Un abrazo.
Sueño con ir..respirar el aire que lo circunda...
ResponderEliminardesde niña...
Espero se cumpla mi deseo...
Besos, Antonio!
Yo he estado allí y es fantástico, lástima que esté tan orientado al turismo. Parece que te trasladaras a otra época. Además, a la salida el atardecer era espectacular. Muy bonito el vídeo y la música.
ResponderEliminarEspero que pueda cumplirse....
ResponderEliminarPorque ya es hora de que la humanidad pueda confiar en la sabiduria_nobleza......
Queremos cambiar quién nos gobierna, y debemos de volver a creer en las formas de gobiernos ancestrales...
Lástima que sea fantasía...
Pero sí me apunto a ello....
Sobre Mike Oldfield, no me repetiré...
Salu2sssss......
Querido Antonio
ResponderEliminarAntes que nada, te quiero agradecer tu invitación para visitar tu blog personal. Me ha encantado. Para empezar, me llegó muy hondo ver este cuadro de Kaspar David Friedrich, pintor del romanticismo alemán con quien me identifico bastante.
Luego, cuando vi que mencionabas a Hermann Hesse, me sentí emocionada, pues es uno de mis personajes favoritos de todos los tiempos; yo lo considero no sólo un extraordinario escritor, sino casi casi mi gurú en esta vida. Me agradaron todas las imágenes y la música, el formato de la Página... en una palabra: toda la atmósfera que rodea a los textos seleccionados.
Por otra parte, me parece bueno y oportuno que cites a Nietzsche. Siempre es bueno parar nuestro carro y reflexionar sobre este tipo de cuestiones. Siendo pintora de vocación, quiero decir que mi tirano interior toda la vida me ha empujado a plantarme delante de una hoja de papel o una tela y explayar mis sentimientos con pinceles, lápices o pluma. Más que asistir a tertulias con buena mesa , buena bebida y pláticas ligeras, (aunque no niego que lo hago de vez en cuando) mi impulso interior es más bien el de pasarme horas y horas en solitario ante mi caballete, mi restirador o mi escritorio, enfrentando retos creativos.
En los últimos tiempos, se ha ampliado la lista de mis herramientas básicas: mi computadora se ha convertido en un medio importante de estudio, expresión y comunicación, especialmente cuando del otro lado de la pantalla encuentro a seres como tú: inteligente, sensible, culto y profundo.
También he mirado someramente a quienes te acompañan en tu Página, y puedo decir que me han agradado mucho todos...espero irlos conociendo mejor con el tiempo.
Un beso desde México
guao...
ResponderEliminares realmente un lugar de ensueño...
mientras veía el video y escuchaba la música, pude imaginar aquel gobierno.. ese mundo que has imaginado..
impresionante..
gracias por el viaje ;)
Antonio, me alegra haber sido inspirador de esta entrada tuya, agradeciéndote nuevamente que pronuncies mi nombre. Añadiré que algunos seres humanos siguen soñando porque quizás la realidad, sea un río que pasa de largo y veamos desde nuestra ventana.
ResponderEliminarSaludos.
Las utopías siempre son impracticables, en el momento presente, pero quizá lo que hoy es fantasía mañana sea realidad.
ResponderEliminarDe los nobles sabios dirigiendo las riendas del mundo no digo nada, me asusta un poco esa imagen.
Buenas noches.
seeh,es una idea bastante loca,amigo Antonio,mas puede que no se aleje mucho de la realidad xDDD
ResponderEliminarUn abrazo,Antonio y que estés super bien ^^
Espero que el gobierno del mundo, bastante malo, no resida en un castillo de cuentos de hadas, ya no se podría confiar ni en la magia, o, que lo haga, sí, mucho mejor,y responda a nuestros sueños :)
ResponderEliminarSoñemos...
Un beso grande.
Hola, Lena.
ResponderEliminar¿Desde niña? Pues ¿a qué esperas, amiga? Normandía no está tan lejos. Plantéate ir allí este mismo año, en vacaciones. No puedes dejar que ese sueño tuyo espere más tiempo.
Un abrazo normando.
Muy bien, Carmine.
ResponderEliminarSeguro que tu comentario anima a la amiga Lena, que está deseando ir.
Lo del turismo es inevitable en cualquier lugar. Como no nos vayamos a un desierto... E incluso allí nos encontraríamos con algún puesto de refrescos, entre duna y duna, que además vendería banderitas y otros souvenirs.
Un saludo.
Bien, Erik, pues te apunto en la lista, jeje.
ResponderEliminarEl bueno de Mike ya sabe lo que opinas de su música.
Un saludo.
¡Amiga Liz!
ResponderEliminar¡Mi pintora preferida! ¡Qué bueno verte por aquí!
Muchas gracias por tu amable comentario, aunque opino que exageras en lo que a mí respecta...
Entre "inteligente, sensible, culto y profundo", me quedo sólo con lo de sensible. Lo demás me viene muy grande.
Sí, por aquí viene muy buena gente, ya lo irás comprobando, porque espero y deseo que vuelvas a menudo.
¡Un abrazo, amiga, desde el para tí lejano Madrid!
¿No lo conocías, Isis?
ResponderEliminarPregúntale a tu Maga de las Montañas, seguro que ella sabe algo del lugar.
Me alegro que la música y las imágenes te hayan hecho viajar.
Un saludo.
Hola, amigo inspirador.
ResponderEliminarAsí es, soñamos porque el río de la vida se nos escapa, necesitamos del sueño como compensación a tantas carencias.
Un saludo.
Ya lo sé, Alfaro, pero quería recalcar ese hecho, ese lamentable hecho.
ResponderEliminarEn cuanto a los sabios, te aseguro que a todos me los imaginé muy buenos, sabios de cuento, de un amable cuento...
Buenas tardes, poeta Alfaro.
Sí, estoy bastante loco, Marcelo, pero tú tampoco andas muy allá si dices que "puede que no se aleje mucho de la realidad" XD
ResponderEliminarUn abrazo desde el otro lado de Innsmouth.
Hola, Moony.
ResponderEliminarEl gobierno que imaginé en mi ensoñación no era malo, sino todo lo contrario.
Soñar no cuesta nada, y tampoco sirve para nada, excepto para hacernos felices durante esos momentos.
Un beso.
Mi amigo, tengo un regalo para ti en mi blog. espero te guste. cariños
ResponderEliminarDejé el comentario de esta entrada en la siguiente...
ResponderEliminarUn abrazo atlántico desde el océano del Mont saint Michel !
ResponderEliminarKenavo (bye)!
No sé si has estado...Yo me quedé con ganas de pernoctar allí, tiene algo mágico y mistérico...
ResponderEliminarSaludos Antonio. El lugar es hermosísimo y realmente es un lugar “encantado”. Hace casi treinta años,- bendita la senectud- pasé unos días por la zona de Saint Malo y el Mont Saint Michel; llegué con gran ilusión pero salí cabreado. El lugar, repito, es de ensueño. Pero las calles son extremadamente angostas y estrechas, abarrotadas de tiendas de souvenirs y de todo tipo de turismo en masa. Recuerdo que era en Marzo, es decir no era expresamente “temporada alta”, pero estaba impracticable. La belleza y la espiritualidad eran sistemáticamente sepultadas por los transeúntes. Me niego a imaginar terminantemente como está aquello ahora, en un mes de Agosto.
ResponderEliminarEs decir, elijo verlo desde lejos, como en el clip que nos has brindado y fabular como era aquello, en el año mil.
Gracias, Cristal.
ResponderEliminarCon mucho retraso, pero ahora mismo voy a leerlo.
Por allí te veo...
Hola, Flag.
ResponderEliminarNo te conozco. Si tu comentario significa que estás allí, en Mont Saint Michel, me alegro por tí.
Gracias por el saludo.
No, amiga Bruja, no he tenido aún la suerte de estar allí. Y con los años cada vez viajo menos, así que...
ResponderEliminarPero con la imaginación sí que he estado. Lo de pernoctar allí me recuerda al escritor inglés Paul Brunton, especialista en yoga y temas similares, que consiguió un permiso, a principios del siglo XX, para pasar la noche dentro de la Gran Pirámide.
Por supuesto, según cuenta, fue toda una experiencia mística. Si tienes interés, lo narra en su libro El Egipto Secreto.
Un saludo de magia.
Hola, Daniel.
ResponderEliminarLo que imaginaba: lugar encantado invadido por el turismo.
Me pasó algo parecido, salvando las distancias, cuando visité Santillana del Mar, precioso pueblo cántabro que conserva su sabor medieval, pero que también está invadido por lo mismo.
No me molestaba la cantidad de gente, sino la calidad. Aquellas personas se paseaban por allí como si estuvieran en un parque de atracciones.
Pero, en fin, nos queda el poder del ensueño.
Creo recordar que estuve en esa ciudadela por el año MXII. Y aún conservo un pedacito de espada...
Un saludo medieval, Conde.