-- ¿Por qué te vas ahora, amiga? Aún es muy pronto, es de noche...
-- Me llamó ayer la luna, y me dijo que tenía que hacer unos encargos de su parte.
-- ¿Unos encargos?
-- Sí, me dijo que había algunos sueños sueltos por ahí, perdidos, y que había que buscarlos, recogerlos y llevárselos a sus destinatarios.
-- ¿Acaso eres tú la mensajera de la luna?
-- Jeje, puede que sí.
-- Bien, me gusta, pero no olvides que aquí estaré esperándote, y que el alba no tendrá luz si tú no estás a mi lado.
-- Eres un amor, pero también un exagerado.
-- No, no lo soy, sin ti no hay luz.
-- Te quiero.
-- Probaré a bailar con las olas del aire, pero seguro que me sabrá a poco.
-- ¡Tonto!
-- Te amo tanto...
-- Volveré pronto, no te preocupes.
-- Hazlo, o me muero.
-- ¿Sabes una cosa?
-- ¿Qué?
-- Estás loco.
-- Sí, por ti.
-- ¡Jajaja! Estás como una cabra, pero te quiero.
-- Y yo a ti, y no soporto tu ausencia. Dile a la luna que se busque a otra mensajera.
-- No puedo.
-- ¿Por qué?
-- ¿Es que no lo sabes? Yo soy hija de la luna.
Antonio HM
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- "The Things You Are To Me"
- Elaine Paige
Asì es el amor, no sabe de razones.
ResponderEliminarMe gustarìa pensar que algùn sueño, de esos que estàn sueltos, fuera para mì. (bueno por soñar no se paga verdad?)
Imagen y mùsica, ambas son hermosas. Gracias.
Hasta pronto.
Le veo inmerso en tiempos nuevos y felices Sr. Druida.
ResponderEliminarHay cosas intemporales como la Luna o los sueños. Me alegra saber que en esa luz del alba has encontrado lo inesperado.
Abrazos para tí y para esa hija de la Luna amigo.
Ay, es verdad, Amanecer, el amor sólo sabe de una razón: ¡vivirse!
ResponderEliminarOjalá que alguno de esos sueños te llegue, y te abrace.
Besos, amiga.
¡Vaya! ¡Si ha venido la desaparecida Cristalook!
ResponderEliminarGracias por tu visita.
Hay cosas intemporales, como la Luna o los sueños, tal y como dices, pero tú pareces más bien atemporal, jeje, porque te pones al tiempo por sombrero.
Hay algo que no entiendes: no he encontrado "lo inesperado" en esa luz del alba, sólo decía -el del diálogo- que no habría luz si ella, su chica, no estaba.
En mi caso personal, encontré esa luz una tarde de invierno, en una plaza, con cielo gris y música en los ojos; corría una brisa suave y fresca y todo se volvió del color de los cerezos...
Gracias por los abrazos, amiga, y vuelve de vez en cuando.
Un abrazo también para ti.
Querido Antonio:
ResponderEliminarHe venido aquí, he visto, me he ido, te he respondido en las Amapolas, he vuelto... como te digo allí, esta nueva luz, aunque sea de luna, parece tan de verdad que no quería irrumpir en ella, interrumpirla.
"Y todo se volvió del color de los cerezos". Precioso. Mi enhorabuena, Antonio. Y también te decía en las Amapolas justamente algo que también dices aquí: "vivirse". Vívelo, sí, a fondo, y ¿qué importa todo lo demás?
Un gran abrazo.
Te aseguro que la Gioconda ha sonreído. Y es que no hay nada como ver el amor bajo la lluvia, o bajo la luna.
ResponderEliminarFelicidades.
Un abrazo Antonio.
Antonio, estoy de vuelta, y me alegro ver un texto tan hermoso, ¿una razón para mi?, volver y leerte, el amor se descarga sobre mi pc.
ResponderEliminarSueños que nos llevan de la luna a las estrellas, de las estrellas a las pupilas y de las pupilas al corazón y de produce el gran milagro de la voluntad, VIVIR EL AMOR.
Me alegro de volver a leerte.
Te pongo en mi blog, para que te comparta los que me comparten y además tenerte a la vista, así de sapareceré por menos tiempo.
Un abrazo.
Y estas cosas ¿llegan así de improviso... todo se vuelve del color del cerezo?... ;) ummmm gracias por recordármelo... casi lo había olvidado :)
ResponderEliminarTengo que mirar al cielo más a menudo... igual alguna estrella, o mi luna, me están desesperadas haciéndome guiños y yo sin enterarme... "siezqueeeee"
Por si no queda claro, esto es purita envidia.
Besotes.
Pues encontrar a una hija de la luna no es cosa que les pase a muchos...
ResponderEliminar¡Y que ese encuentro abra la puerta hacia el amor!! Mucho menos... :)
Que ese camino compartido les conduzca a descubrir todos los rostros posibles del amor ;)
besos!
Sí, Bel, esta nueva luz de luna es de verdad, muy de verdad.
ResponderEliminarVivirlo es lo que quiero, ¡hasta el fondo!
Y lo demás importa muy poco.
Un abrazo, Amapola.
No te imaginas lo que me alegra leer eso, de que la Gioconda ha sonreído.
ResponderEliminarGracias, Carmen, y sigue sonriendo.
Un abrazo.
Gracias, Lola, por tu regreso y por ponerme en tu lista.
ResponderEliminarEl amor es una cosa extraña, que viene cuando quiere, pero cuando viene... hay que entregarse a él por entero.
Un abrazo.
Sí, amiga Luisa, así es, de improviso.
ResponderEliminarEl amor no llama a la puerta, entra de golpe, o a veces sutilmente, pero siempre sin avisar.
Y cuando lo hace todo se vuelve del color de los cerezos, te lo aseguro, jaja.
Como decía aquel final de una película de Chaplin: "mira al cielo, Luisa, mira al cielo".
Tu "envidia" es muy sana, amiga, y me alegra, porque eso significa que esta magia es contagiosa. Así que... estáte pendiente a esos guiños de tu estrella o tu luna.
Besos, amiga.
Pues sí, amiga maga Isis, así ha sido, he encontrado a una hija de la luna.
ResponderEliminarJusto la mujer que siempre busqué.
Muchas gracias por tus deseos.
Besos, maga.
Pues qué bien...
ResponderEliminarQue vivan la Luna y el Amor... ¡y el Messenger!
La tecnología al servicio de la buena comunicación.
Felicidades al amanecer, a ti y a tu amada.
Y mientras la madre Luna observa satisfecha, los sueños viajan con el viento.
ResponderEliminarUn beso.
:)
Sí, mi querido Antonio..
ResponderEliminarEl escritor era Cortázar ;)
EL AMOR TE HA PUESTO LÚCIDO ¿EH?? ;)
Mentira..
La verdad es que siempre lo has sido; sino, lo hubieras dejado pasar de largo por tu puerta, creyendo que eso 'inesperado' no te traería algún milagro...
(y ahora que lo pienso, dices: "la que siempre busqué"; así que no era tan 'inesperado'... tal vez tan solo esperaba el momento de llegar.. Tal vez cada 'detalle' te anunciaba que estaba un paso más cerca ;)
Que tengas un fin de semana lleno de amor!!!...
Luna... sueños... deseos... amor...
ResponderEliminarEl motor amor... Así es y, cuando llega (aunque sea como un elefante en una cacharrería) hay que acogerlo,.. y vivirlo.
Saludos.
Me ha encantado,el poema,la conversación,dejas volar la imaginación...
ResponderEliminarBesitos.
Hola, Liz.
ResponderEliminarEso, que vivan la luna y el amor, pero... ¿el messenger?
No concebí este breve diálogo como un chat, sino como una conversación en vivo y en directo.
Pero es igual.
Gracias por tus felicitaciones.
Un abrazo, pintora de sueños.
Hola, Anónimo.
ResponderEliminarAl emplear usted la expresión "madre Luna" me da por pensar que es también su hija...
¿Eres tú, amor mío?
Sí, seguro que sí, jejeje. Gracias por el beso.
Efectivamente, "los sueños viajan con el viento". Y el viento es el azar, el viento es la vida, y lo más hermoso es que navegamos en distintos barcos pero con un mismo rumbo.
Te envío un beso de viento.
;)
PD.: Y si no eres tú, perdón por el atrevimiento, jeje.
Hola, amiga maga Isis.
ResponderEliminarLa verdad es que no nací "lúcido", pero hace ya muchos años que tengo mis claridades, no siempre pero las tengo, jeje.
Lo "inesperado" se denomina así porque uno no se lo espera, pero eso no quita para que siga buscando con locura aquello que desea. Y, aun sin esperarlo, eso ha venido...
Así que doy gracias al universo entero por crear un puente entre dos seres tan afines, que estaban tan lejanos, y porque la luna y las estrellas nos hayan sonreído a ambos, ¡por fin!
Quizá hubo "detalles", como dices, pero uno no suele ser consciente de eso, no hasta que se cruza el puente...
Y sí, te aseguro que este fin de semana ha estado llenito de amor.
Y ese amor me sigue latiendo por dentro.
Un fuerte abrazo, amiga.
;)
Hola, Mar, y bienvenida.
ResponderEliminarYo no soy un elefante, sino un lobo, pero puede que el mundo sea como una cacharrería, eso es cierto.
Lo que sí está claro es que el motor de todo es, como bien dices, el amor. Sin amor no hay nada que merezca la pena vivirse.
Saludos.
Pantera en la Noche, da un poco de respeto tu nombre, jeje, pero que sepas que me encantan las panteras.
ResponderEliminarGracias por tu visita, espero que sigamos leyéndonos.
Besitos de lobo.