Aquí escribo,
al filo de la noche,
en este cuaderno de cristal
y humo,
para ahuyentar las sombras.


Con la ventana abierta,
por si viene el pájaro
del sueño.

AMB







miércoles, 1 de abril de 2009

Lo bien hecho


Aparte de haberlo leído en libros o escuchado en alguna parte, lo he comprobado con la experiencia propia: la mejor forma de anular el efecto de algo que estuvo mal hecho es haciendo algo bien.
Y cuantas más cosas se hagan bien o cuanto mejor se haga una cosa, más lejos y vacía quedará aquella acción mal hecha.
Parece una verdad de perogrullo, pero lo digo porque estas verdades elementales suelen olvidarse con mucha facilidad.
Puede ser cualquier cosa ínfima, como esa labor casera que tanto nos cuesta hacer porque no nos gusta. Poner un poco de esfuerzo y hacerla es bueno para la casa y para nuestra salud mental. Y si encima ponemos un poquito de corazón en ello, el bienestar está casi asegurado, porque el bienestar nace del bien-ser.
El I Ching lo dice así:

Todo lo que se ha malogrado por culpa humana
también puede subsanarse mediante el trabajo humano.
De esa forma el mundo vuelve a estar en orden.

Otra cosa, que tiene que ver con esto y con todo: no intentemos controlar los pensamientos, sólo observémoslos, observemos cómo revolotean caprichosos de un lado a otro como pájaros jóvenes y curiosos. Lo que daña la mente es sentirse culpable. La obsesión, la fijación en algo genera la sombra y la herida.
Cada habitación de la casa, de la mente, tiene cosas en desorden o mal colocadas. Hagamos lo que nuestras manos quieran hacer en ese momento, en vez de fijarnos en una sola tarea y sentir culpa porque otra cosa "nos distrae".

Es algo así como una danza. Vayamos de cuarto en cuarto como bailando, ligeros como una pluma movida por el aire. Cuando veamos algo que sentimos que está mal, pongámoslo en su sitio y a otra cosa mariposa... No nos quedemos allí, hincados los codos o las rodillas, esforzándonos durante horas para que esa habitación quede "perfecta", porque lo único que vamos a conseguir es cansarnos y sentir que aquello no tiene arreglo, porque los muebles no son los adecuados o porque la estancia es demasiado estrecha o demasiado ancha.
Vayamos al detalle, por pequeño que sea, a ese que nos ha llamado la atención y dejémoslo bien colocado, limpio, en su sitio. Y marchémonos a otra parte. La mente no quiere estar ahí más tiempo. Quiere moverse, no quedarse fija. Por lo general, la acción mal hecha está provocada por la obsesión, por la rigidez de un mandato que quiere transformar la realidad según un diseño preconcebido, que suele ser "racional", fijo y a contracorriente.

Todo esto, que parece un pequeño galimatías, se resuelve facilmente haciendo las cosas bien. Y sobre cómo se hace eso de hacerlo bien, cada uno tiene su propia lucecita interior que se lo indica. El propio ánimo es el mejor barómetro.
Como decía, lo "bien hecho" es la mejor fórmula para borrar ese residuo de culpa y sombra que nos dejó lo que se hizo mal. Ya que no se puede volver en el tiempo para rehacerlo, lo único que nos queda es disolver su peso, aclarar su oscuridad, y el modo de conseguirlo es haciendo otras cosas bien.
Cuando la casa, poco a poco, llegue a estar limpia y en orden, sin sombras grises en los rincones y sin telarañas del ayer colgando de las cortinas, un aire limpio y fresco entrará por la ventana y nos hará compañía.

AC.
(1 de abril, 2009)

50 comentarios:

  1. Palabras muy acertadas, me ha gustado leerte. Has definido con ellas lo que intento hacer desde hace años, día tras día, preocuparme lo justo por las cosas, solucionarlas y pasar a otras, es lo mas sano, creo. Ser expeditivo es importante, asi consigues el tiempo que necesitas para disfrutar de tu presente, cosa que no haces si te quedas detenido en tus pesares, o en lo que has hecho mal. Un abrazo Antonio.

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  2. Hola, Andrea.
    Se ve que lo has entendido muy bien. Pues nada, a ser expeditivos, que hay muchas cosas en el presente que merecen nuestra atención y no hay tiempo que perder en rincones oscuros.

    Un abrazo expedito.

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  3. Hola mi querido Antonio...

    "AGE QUOD AGIS" Es el lema de hoy ;) "Haz lo que haces"...

    Todo lo que has escrito es muy budista ¿sabes? ;) ME HA ENCANTADO LEERTE!!! Por supuesto, con total atención... Ya dicen por ahí que la atención en la luz de la conciencia.

    Comparto mucho todo lo que has escrito... Pero esta mente es tan traviesa.. Voluntariosa, desbocada, inquieta ;) Y, como bien lo señalas, al momento de querer controlarla se pone peor, pues siempre que queremos controlar los pensamientos lo hacemos por culpa o por negarnos a ver o porque los juzgamos.

    Y, como bien lo has dicho, surge la sombra. Has dicho mucho sobre tantas cosas, amigo, que me voy con mucha claridad, es decir, de la forma adecuada para empezar a hacer BIEN las cosas este día..

    Todo es como una danza.. Qué buena intuición, amigo!... tener un sentido lúdico de la vida nos enseña a relajarnos, a fluir, a ser uno con la obra, a jugar este juego de la mejor manera, sin tomarnos tan en serio y sin PRE-ocuparnos de nada...

    Y sí... Son esos detalles los que nos hacen poner atención, volcarnos en lo que hacemos...

    Ha sido maravilloso leerte, querido Antonio!!!

    te dejo un inmenso, inmenso abrazo ;) El presente es la puerta hacia la eternidad, dicen ;)..

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  4. Me ha encantado tu entrada. Creo que no hay que remover las entrañas sucias, pero los humanos somos capaces de lo mejor y lo peor. Pero la culpable de todo es nuestra maldita CONCIENCIA que no nos deja ir hacia adelante. Saludos. Carmen.

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  5. Buenos días, Antonio!
    (aunque para ti serán buenas tardes, yo me encuentro timando mi cafecito matutino)
    Es pura verdad lo que dices. Hacer las cosas bien. Yo me rijo por eso, siempre.
    Y entre todas las "cosas" que debo hacer bien está por supuesto el orden y limpieza de mi casa y mi persona, primer peldaño del edificio. Es mi rutina, mi "terapia ocupacional". Porque además, no puedo estar agusto mirando desorden a mi alrededor.
    Pero también están esas otras "cosas" que siento y quiero hacer bien: mi trabajo artístico, mi desarrollo intelectual y mis relaciones con los demás. Estar al tanto de la vida de mi gente, de mi familia, de mis amigos.
    Y se me ha vuelto ya una costumbre, también, mantener al día mi "correspondencia" con ustedes, mis amigos virtuales que tengo la fortuna de conocer; hacer bien las cosas es, también, leernos y respondernos en esta pantalla de cristal. Se siente uno muy bien al hacerlo, y muy mal cuando por alguna circunstancia no se ha logrado (ejemplo: tu reciente desierto).
    Gracias, amigo, por estar siempre al pendiente del orden y concierto de las cosas y los pensamientos.
    Ah! Y la imagen que has puesto al final de tu escrito es extraordinaria: ¡qué nitidez, qué sencillez y qué limpieza guardan los japoneses! Bien decía Isis que era muy budista tu texto. Esa imagen era el corolario justo y apropiado para tus palabras.
    Un beso que vuela hacia allá como en una danza.

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  6. Me gusta mucho tu planteamiento Antonio. En muchos sentidos son ideas que debo practicar más a menudo. Tengo la mala costumbre, por la que sufro tremendamente, de procrastinar. Principalmente las cosas a las que considero desagradables. Una persona muy cercana y amiga siempre me dice: ‘si dejas las cosas desagradables para después, se hacen aún más pesadas y desagradables, cuánto antes las sacas de tu agenda y de tu cabeza, menos sufrirás’, que palabras tan verdaderas y coincidentes con tu entrada. Estas cosas que van quedando pendientes, o que resolvemos mal, aumentan la entropía de nuestro entorno, y así, nuestra sensación de malestar y confusión.
    Gracias Antonio, por recordármelo de una manera tan afable y delicada, es un gusto leerte.

    Besos

    PD. Espero que estés mejor ;), yo aún no estoy del todo recuperada

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  7. Hay algo de mariposa en ese revolotear suave sobre las cosas...y se consigue al cabo del tiempo cuando se logra despegar y soltar lastre , primero el de uno mísmo y sus amarres físicos y mentales, despues todo viene por si solo...fluye y deja de ser molesta esa cosa que antes resultaba angustiosa, desesperante, odiosa...poco a poco todo se vuelve más y más sencillo.

    Besito volado.

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  8. Difícil tarea la de "correr" los pensamientos obsesivos o negativos.A veces lo malo se instala an alguna de nuestras salas, y nos tienta en su regodeo.
    Hace años inicié ese largo camino.Hoy puedo decir que amo el viento que pone las cortinas flameantes.

    "...y estar vivo es fluir como el agua..."(Yasunari Kawabata)


    Te dejo un beso, amigo Antonio!

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  9. Hola, Isis-Maga.

    Sí, es posible que sea algo budista, pero no siguiendo una disciplina en particular, sino 'budista' a mi manera. Siempre me ha atraído el budismo, no el clásico sino el que llaman en Japón "Zen", que viene del chino "Ch'an". O sea que algo se me debe notar en lo que escribo.

    La verdad es que sí, quizá he intentado decir mucho sobre muchas cosas, como afirmas. Por eso me quedó al final la sensación de que no quedaba del todo claro. Ya sabes: "el que mucho abarca poco aprieta". Pero aún así dices que te vas "con mucha claridad". Pues me alegro mucho.
    Efectivamente, amiga, "el presente es la puerta hacia la eternidad". No hay otra.

    Un gran abrazo.

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  10. Hola, Carmine.
    Me suena que antes te pasabas por aquí, o eso creo recordar.
    No, no hay que "remover las entrañas sucias", sino lavarlas con entrañas limpias. A eso me refería.
    La conciencia no es culpable de nada, Carmen. La conciencia es lo que nos permite percibir el mundo. Somos conciencia y no otra cosa.
    El ser 'inconsciente' es el ser muerto.
    Lo que ocurre es que hay conciencias 'malvadas', en el sentido de que están estancadas, deformadas, fijas en alguna obsesión, y son negativas porque impiden el avance, impiden el natural desarrollo de la vida.
    A esas conciencias hay que liberarlas de su carga, limpiarlas de rémoras, para que puedan abrirse de nuevo a la evolución, para volver al camino.
    Y para eso es una buena ayuda algo tan simple como hacer las cosas bien.

    Un saludo 'consciente'.

    (me alegro de tu vuelta por estos lares)

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  11. Me encantó, sencillamente me encató. todos esos enredos me andan a veces por la cabeza y tu lo expones de una forma tan clara.La obsesión y la culpa son cosas muy malas un lastre que nos amarga la vida.
    Me gustaría esa casa limpia y ordena, sabes voy a dejar libre mis pensamientos, que vaguen por donde quieran, a ver que encuentro.

    Gracias por las palabras que dejaste en mi casa. Entendiste a la perfección mi idea.

    Un gran beso Antonio.

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  12. ¡Amiga Liz, te has vuelto a quedar sin tu lirio!
    Tienes que hablas muy seriamente con Google, que esto pasa ya de castaño oscuro.

    Todo lo que comentas es necesario hacerlo, y hacerlo lo mejor posible, son nuestras rutinas, las que hemos elegido, pero no olvides lo que dices al final: "como en una danza".
    Y añado: como en una danza que vive y cambia, y que no es rutinaria en absoluto. Es decir, no es un baile cerrado, con los pasos programados, sino uno que se mueve al compás del aire...

    Sí, la imagen final es muy nítida, muy limpia. Los japoneses y los chinos han llegado a refinamientos exquisitos en el arte de vivir. La pena es que hablamos de una minoría... Hace muchos años trabajé en un restaurante chino, y ni el más viejo de allí, que era el dueño del local, había oído hablar del Tao te Ching.
    Pero todos sabían mucho de economía y de dólares, de deportes y de marcas de lujo.

    Un beso, amiga de umbrales.

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  13. Hola, Gárgola, y gracias.
    No entiendo "procastrinar". Imagino que es una expresión catalana. Quizá signifique relegar o posponer...
    Pero entiendo bien todo lo demás. No me refería expresamente a cosas desagradables que no queremos hacer, sino más bien a las cosas que hemos hecho mal y que por eso se vuelven una carga desagradable. Según lo veo, hacer 'otras' cosas nuevas y hacerlas bien equilibra la balanza e incluso la inclina a nuestro favor.
    De todas maneras, tu persona amiga tiene razón. Si algo que no nos gusta debemos hacerlo inevitablemente, cuanto antes mejor, y añadiría que sería bueno hacerlo como si interpretáramos una película. ¿Me entiendes? Es decir, actuando. Que no todo nuestro ser estuviera allí, en esa situación "desagradable", sino sólo una parte. Así el posible daño se minimiza.

    Que te mejores, amiga. Yo más o menos estoy bien.

    Un abrazo.

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  14. Hola, Brujita.

    Nada que añadir a tus palabras. Lo has expresado de maravilla. Se nota que escribes haikus, por tu capacidad de síntesis.
    Así es amiga, hay que soltar lastres, y cuando estamos lo bastante limpios y somos lo bastante libres la vida fluye por sí sola, y aquellas sombras del pasado desaparecen, porque ya no tienen a donde agarrarse.

    Un beso volado también para tí.

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  15. Sí, amiga Silvia, pero fíjate que todo lo que vale la pena en esta vida entra siempre dentro de ese campo que llamamos "difícil".
    Lo demás, lo "fácil", engloba lo mediocre y lo negativo de la vida.
    Si lo "malo" está instalado en alguna de nuestras salas, llenemos las salas restantes con lo "bueno", hasta que esa sala quede empequeñecida, y poco a poco lo malo que hay dentro se irá por falta de espacio.

    "Miró a través de las puertas vidrieras de su estudio. Al pie de la colina que se levantaba detrás de la casa había un gran montículo de tierra proveniente de una excavación, practicada durante la guerra para construir un refugio antiaéreo. La hierba lo había cubierto, y entre las hierbas florecía un macizo de flores de color lapislázuli. Eran flores pequeñísimas, pero de un azul brillante, intenso. Aquellas flores eran las primeras en aparecer en el jardín, con la sola excepción de la adelfa. Además permanecían abiertas durante largo tiempo. Oki ignoraba el nombre de aquellas flores, que no figuraban entre las célebres precursoras de la primavera; pero estaban tan próximas a su ventana, que más de una vez experimentó el deseo de arrancar una y estudiarla. Nunca lo había hecho; pero eso no hacía más que acrecentar su amor por aquellas diminutas flores azules."

    -Primavera temprana
    (Yasunari Kawabata)

    Un beso, amiga Rayuela.

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  16. Pues esta vez no Antonio, no es una catalanada (jajaja), aunque no es una palabra usual, me gusta mucho.

    de la RAE:

    Procrastinar (verb)(Del lat. procrastinare).

    1. tr. Diferir, aplazar.
    (o sea que el significado lo has entendido perfectamente)

    un abrazo sin procrastinación

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  17. Bien, LunaAzul, que vaguen por donde quieran y que no se fijen demasiado en ninguna cosa, a no ser que sea algo muy especial.
    A mí también me encantó tu cuento de "Ana", y me alegro de haber acertado, porque suelo ser muy torpe para esas cosas.

    Un beso, Juana.

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  18. Muchas gracias Antonio. Es como si me lo hubieras dicho a mi. Es de las cosas másbonitas que te he leído. un abrazo., milagros

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  19. Perdona, Gárgola.

    Lo que pasa es que lo leí mal (puedes verlo en mi comentario). En lugar de procrastinar, leí "procastrinar", que no existe. Cambié la erre de sitio, jeje.
    Bueno, al menos acerté con el significado, lo que era fácil siguiendo la contrucción de tu frase.

    Un abrazo sin eso.

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  20. Pues me alegro, Milagros.
    Qué bien que lo que uno escribe encuentra el destinatario adecuado, que no sólo entiende sino que lo toma como algo personal.
    Es el mejor destino que puede hallar la palabra.

    Un abrazo.

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  21. No creo que seas torpe para nada. A mi me pareces una persona inteligente y culta, y como tu bien sabes interpretaciones hay para todo los gustos.
    Besos.

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  22. Pues muchas gracias, LunaAzul.
    Aunque sigo pensando que en esas cosas soy torpe, porque nunca sé muy bien el sentido de la narración. Me gusta o no lo que leo, pero nunca estoy del todo seguro de qué es lo que se quiere decir. Sólo puedo intuirlo y quizá aproximarme.
    Debe ser porque estoy más acostumbrado a una prosa, digamos, 'discursiva', o simplemente prosaica. Cuando el asunto roza lo poético, me empiezo a perder.

    Un beso, desde las tres de la noche, y con la ventana cerrada porque hace frío.

    (como ves, es cierto que soy nocturno)

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  23. Amigo Antonio: muchas veces me pasa que "casualmente" doy con una persona o con un lugar que me acerca la frase justa, la palabra que estába esperando leer o escuchar. En esta ocación fuiste tu. Gracias mil.
    Un abrazo

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  24. Si ya nos lo decía Mary Poppins, lo más práctico es hacer las cosas y con una sonrisa, que así se disfruta doblemente, por haberlo hecho bien y mientras se ha ido haciendo...

    Y no quedarse estancado sin realizarlas y agobiándonos. Desde luego, las cosas que se nos han torcido sólo las podemos enderezar nosotros, pero como bien dices, tampoco podemos dedicar demasiada energía en los pensamientos negativos de los condicionales, esos " Y si...", que sólo sirven para enrarecer el ambiente que nos rodea.
    Una entrada muy sensata.

    Te dejo sugus en la entrada de tu casa...

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  25. Bueno Antonio, lo primero que se me ha venido a la mente nada mas leer esta ultima entrada y, es que hace 70 años alguien,apoyado por una forma de pensar de iglesia, con los mismos muebles viejos, causó tantas heridas por la estática mental de masas mal informadas.

    Un abrazo.

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  26. Gracias por todo esta luminosa entrada (eso que te consideras nocturno). Me ha gustado mucho, como atisbar un espacio lleno de armonía.
    Abrazos.

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  27. Querido Antonio,
    Absolutamente de acuerdo con vos, y cuando hablé de "difícil", no lo hice en oposición a lo "fácil",que, ciertamente,encierra lo mediocre. Cuando dije "difícil camino", me referí al que nos insita a saltar los escollos, a luchar contra nuestra propia negatividad, a "limpiar" la casa interior de "facilidades", a despejarla de toda oscuridad.


    "Los bosques desfilaban junto a la ventanilla, desdibujados por una espesa bruma que sugería tibieza. Muy arriba en la bruma, las blancas nubes estaban bañadas en una luz trémula, que parecía ser irradiada por la tierra. Pero a medida que el tren avanzaba,el cielo se despejó en su totalidad."


    Yasunari Kawabata, "Lo bello y lo triste"

    Un beso,amigo Antonio! (avanzando y despejando)

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  28. Esta vez he llegado algo tarde, espero no tener que hacer a cambio muchos comentarios que remedien la tardanza.
    A un obsesivo no debe resultarle tan fácil desplazar su mente de un objeto a otro, casi siempre necesita refuerzos del exterior, o no?
    me ha parecido muy interesante tu entrada y me ha gustado.

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  29. Antonio ya me pondré al día e leerlo, es que estoy mejorando de apoco y no me queda otra que publicar cosas que tenía en borradores, hasta que esté bien, un gran beso!!

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  30. Antonio, amigo nocturno y estepario:
    Es verdad que resulta lamentable lo de mi lirio... no sé en qué consista, pero a veces me "acepta" el sistema mi contraseña, y a veces no. Sencillamente asi. Temperamental el Google, ¿no? Ojalá esta vez sí lo quiera dejar pasar...
    Y con respecto a la actitud "dancística" y espontánea que es conveniente para estos menesteres, estoy completamente de acuerdo: es la actitud más sana y agradable para hacer las cosas bien.
    Saludos desde aqui.

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  31. Hola, Gustavo.
    No sé qué "casualidad" te ha traído hasta aquí, pero me alegro, y más si te ha servido para algo.
    Y sobre todo me alegro de que tu último cuento fuera sólo eso, un cuento. Te aseguro que al principio, según leía, me lo estaba creyendo como verídico...
    Si Laura se ha ido, será también por 'casualidad', y esa misma casualidad te llevará a conocer a otro alguien que quizá te llegue más cerca.

    Un saludo, señor Fogel.

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  32. Gracias, Darthpitufina.
    No se me había ocurrido la relación con la buena de Mary Poppins. Gracias por señalármelo.
    Sí, hacer las cosas con una sonrisa ayuda mucho, y las píldoras amargas hay que tomarlas con un poco de azucar...

    Gracias también por los sugus, hacía mucho tiempo que no los comía.

    Un dulce saludo.

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  33. ¡Hola, Terry!

    Me imagino que te refieres a cierto señor bajito al que en cierta ocasión vieron en el pueblo de Hendaya, conversando con su amigo teutón, el que usaba un bigotito a modo de mala imitación del que se pintaba Chaplin...
    Pues siento que mi texto te evoque tan malos recuerdos.
    Tú, amigo, dedícate a tu casa, que seguro que tienes por ahí algún rincón sin ordenar.

    Ah, Terry, me gustaría que vieras el cuadro surrealista que usa Fogel como presentación en su blog. Está estupendo. Se trata de tu querido Don Quijote frente a unos molinos cuyas aspas son... ¡mariposas! Te gustará.
    El enlace está aquí mismo, en los comentarios, pero te lo pongo:

    http://cuentosalcontado.blogspot.com/

    Un saludo, Don Terry.

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  34. Me alegro, Bel.
    Sí, soy nocturno, pero recuerda que en la noche también hay luz.

    Un abrazo.

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  35. Hola, Silvia, me entiendes y te entiendo porque estamos diciendo lo mismo. No es que lo "fácil" se oponga a lo "difícil", son dos vías diferentes, y una lleva a unos sitios y otra a otros muy distintos.
    Lo importante, amiga, es eso de avanzar y despejar.

    "El tiempo pasó. Pero el tiempo se divide en muchas corrientes. Como en un río, hay una corriente central rápida en algunos sectores y lenta, hasta inmóvil, en otros. El tiempo cósmico es igual para todos, pero el tiempo humano difiere con cada persona. El tiempo corre de la misma manera pata todos los seres humanos, pero cada ser humano flota de distinta manera en el tiempo."

    -Pérdidas estivales
    (Yasunari Kawabata)

    Un beso sin tiempo, Rayuela.

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  36. Sí, Alfaro, has llegado un poco tarde, ya me iba... jejeje.
    Pero no por eso tienes que hacer más comentarios, que esto es voluntario.
    Efectivamente, a un obsesivo le cuesta mucho mover su mente de un objeto a otro, de un asunto a otro, y necesita ayuda para hacerlo. No sabe bailar solo.
    Mi consejo es que dejara de ser obsesivo. Al fin y al cabo, nadie nace con eso, y si es algo 'negativo' que se construyó con el tiempo, el mismo tiempo puede deshacerlo, ¿no crees?
    Todo depende en principio de ver la salida, y a continuación hay que animarse y salir. Lo que tenemos de malo lo podemos quitar haciendo lo bueno.
    Creo que merece mucho la pena aprender a bailar.

    Buenas noches, amiga poeta.

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  37. Que te mejores, Kuoremio, eso es lo importante, ya tendrás tiempo para leer, si quieres.

    Un abrazo.

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  38. Hola, Liz.

    No creo que Google sea "temperamental", porque Google en este caso no es nadie, a lo sumo un robot. Pero algo sí pasa con tu contraseña, y eso es lo que deberías averiguar.
    Seguro que si a veces no te la acepta es porque tiene algún dato tuyo duplicado, y unas veces la reconoce y otras no, quizá porque esa password está asociada a más de un nombre. Puede que sea eso.

    En cualquier caso, tú danza, que es lo que está haciendo Google contigo, bailando tus datos. Síguele los pasos.

    Un abrazo bailón, amiga.

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  39. Te leí en el trabajo apenas pusiste el tema.

    Menos mal que vuelvo a casa de fin de semana como los estudiantes jejeje.

    Ni una pega que ponerte, porque lo leía y todo era: si, claro, exactamente, claro que sí, ... estupendo... perfecto.

    Y es que a medida que lo leía sentía ya hasta los beneficios de reparar malas acciones del pasado con buenas en el presente.

    No sé si será una mala acción estar haciendo que fumes, pero habrá que seguir así un tiempecito :)

    Gracias por estos textos maravillosos que nos regalas Antonio.

    Un montón de besos.

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  40. ¡Hola, Luisa!

    Qué bueno verte por aquí. Y además estás de acuerdo con lo que digo. Me parece estupendo.
    Lo de fumar lo he reducido, como ya sé que tardarás en volver... No vaya a ser que cuando regreses este lobo esté ya para el arrastre.

    Buen fín de semana, amiga, y descansa, no te líes ahora a leer todo lo anterior y a dejar comentarios por todas partes, que tú eres capaz.

    Un abrazo grande como una encina.

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  41. Bueno y además ya sabes lo que dicen de la casa...que es nuestro subconsciente. Es decir, que cuando la tenemos ordenada nosotros estamos ordenados, limpia (nos sentimos bien, felices, hemos limpiado las emociones negativas...), así que la comparación de la casa me ha parecido genial... Aunque no sea tan fácil en algunas ocasiones...

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  42. Antonio, he llegado hasta tu espacio desde el blog de otro amigo. Espero sepas excusar esta intromisión.
    Me ha gustado mucho el post, sobre todo la imagen de la danza. Creo que es muy acertada. Si quiséramos... es tan fácil solucionar los pequeños tropiezos fruto de la cotidianeidad... De lo más pequeño a lo más grande.
    Sañudos.

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  43. Me encanta esta filosofía y ni que decir tiene la veracidad del gran oráculo y maestro I Ching.

    Un saludo.

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  44. Ésta, es otra de esas entradas tuyas, que de alguna forma “temo” comentar. Por dos motivos, uno, por mi naturaleza perezosa que prevé un largo comentario y otro, porque nada más lejos de mi ánimo que generar controversia. Sobre todo porque en líneas generales y en el fondo de la cuestión estoy de acuerdo con lo que dices. ¿Cómo no estarlo? Imposible rechazar la intención de buscar el “bien hecho” o el “bien ser”. La perfección, aunque imposible, no deja de ser una de las metas humanas hacia la que en un momento u otro, todos, intentamos dirigirnos. Algo lícito y quiero creer, hacia lo que todos tendemos de una forma natural.
    Así las cosas, no puedo evitar que me has hayas hecho pensar, como de costumbre… y aunque un poco “procrastinando” he decidido sobreponerme a mi indolencia y plasmar en tu espacio lo que con él me has inspirado.
    Mientras te leía, asentía mentalmente prácticamente a todo lo que has escrito… Peeeero, (jeje!) no sé hasta que punto, según que labores caseras o similares, que conllevan rutinas o actuaciones que nos son contrarias o nos disgustan van a contribuir a armonizarnos con el ambiente que nos rodea. Sean estas las que sean…
    Por ejemplo, y en ese orden de “cosas o hechos ínfimos” que mencionas, te diré que por más intención que le ponga al asunto y por más bien que le haga al Feng Shui de mi entorno doméstico… no me gusta limpiar el horno, cualesquiera que sea el tiempo verbal, pasado, presente o futuro en que lo conjugue… por otra parte, éste acto, (el de limpiar el maldito artefacto) en principio y hasta la fecha, es un hecho más bien “femenino”, cosa nada baladí, si la consideramos desde la perspectiva del “yin” y el “yang”, que es probable que no hayas contemplado (o si…) Pero al igual que Teruel, existe amigo Antonio, existe. Y si a todo ello le añadimos hechos más definitorios o decisivos, como sería por ejemplo, tomar la decisión de despedir a la asistenta, algo que a una servidora le costaría un Congo… pues no sé que decirte…
    Ironías aparte, pensé también que en todo caso, seguiré tu recomendación y haré uso de mi Libro de las Mutaciones. Afrontaré, ésas, y otras cuestiones como un “fluir natural” de los cambios a los que todos estamos sometidos por el solo hecho de transitar por este mundo. Porque, poco o mucho, cambiamos día tras día. Y es que, en ese sentido y ampliando lo que dices, diré que la vida es hoy como lo fue para quienes vivieron hace miles de años. El I Ching, considera los cambios como una parte intrínseca del flujo de la vida. Algo, que no deja de ser una escuela de vida, de la que deberíamos aprender.
    Muchas veces, en nuestro afán de seguridad y de comodidad, nos aferramos a un trabajo que no nos satisface, y que es casi un castigo. A amores y relaciones ya exhaustas y agotadas que nada nos aportan ya. O a la juventud a toda costa, sin aceptar que se nos escapa poco a poco, en ese fluir natural del cambio al que todo está sometido en este Universo…
    La tendencia es a vivir los cambios como una amenaza y no como una oportunidad, lo que muchas veces nos ofusca para ver las ventajas de las nuevas situaciones. El I Ching es el arte de ser versátil de forma inteligente y armoniosa con, lo y los, que nos rodean, en un mundo cada día más cambiante y rápido. Habilidad muy necesaria en la sociedad que nos ha tocado. Un amigo, que bien utilizado puede ser fuente de sentido común y sabiduría.
    Un abrazo Antonio.

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  45. Dicen que la armonía en nuestro alrededor,nos aporta armonía en nuestro alrededor,y tiene mucha lógica, cuando hay desorden,te sientes incapaz de ordenar sin un tremendo esfuerzo...por cierto muchas gracias por tu comentario,pero gracias de corazón,eres un buen amigo Antonio :)

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  46. Sí, Bruja, creo que es más o menos así: la casa es un reflejo de nuestro inconsciente, pero también de nuestro consciente. Es decir, que podemos actuar sobre ella 'conscientemente'. La casa no se mueve si nosotros no la 'movemos'.
    ¿Difícil? Sí, pero como le decía a Rayuela, merece la pena.

    Un saludo.

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  47. Hola, Yurena.
    Intromisión ninguna, éste es un espacio libre y puede opinar quien quiera. Imagino que el amigo al que te refieres es Juan, al que echo de menos últimamente.
    Me alegro de que te guste lo escrito. Pero fíjate que das en un punto crucial, cuando dices "si quisiéramos"... Ese es el 'quid' del asunto.
    Quiero decir que muchas veces sabemos lo que hay que hacer, pero no lo hacemos porque no queremos, o "lo queremos poco", como dice Savater.
    Limpiar la casa, la mente, es en definitiva un acto de voluntad, y no sé yo dónde se compra la voluntad, pero habrá que buscar, porque la tienda tiene que estar en algún sitio.

    Un saludo, Yurena, y gracias por venir.

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  48. Hola, Lito.
    No es exactamente una "filosofía", pero sí una forma de ver las cosas.
    Me gusta tu radiografía cerebral.

    Saludos.

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  49. Amiga Cristal, amiga controversial, polémica por carácter, pero tan cercana en todo. Te echaba de menos, y tengo que decir que me siento en deuda contigo. Aunque me dijiste que no era necesario, siento que me falta algo si no vuelvo otra vez a "los dragones". Lo que pasa es que no siempre encuentra uno el tono y el momento adecuado para responder como el interlocutor se merece.

    Vamos a ver ese "pero" tuyo: dices que no sabes en qué manera ciertas labores caseras que nos desagradan pueden contribuir a "armonizarnos con el ambiente que nos rodea".
    En primer lugar, tengo que repetir una vez más que yo no soy filósofo ni psicólogo, y que mis escritos son sólo reflexiones personales que no pretenden ser otra cosa.
    Aclarado esto, y teniendo también en cuenta que lo de las labores caseras lo dije un poco anecdóticamente, me atrevo a decirte que... ¡debes limpiar el horno!
    Precisamente porque no te gusta, debes hacerlo. Pero no como lo has hecho hasta ahora, acordándote de la familia del inventor del "Forza de Johnson", sino con alegría.
    Y dirás tú: ¡y una leche!
    Pero créeme que se puede hacer.
    Al principio es casi como subir una montaña imposible, todo son negatividades y cabreos, pero ¡se puede!
    Yo, por ejemplo, he estado viendo durante horas una pila llena de platos sucios, cuando me pasaba por la cocina, y me he dicho "a procrastinar"... Pero ha habido otros momentos en que me he lanzado sobre los platos con buen ánimo, y aún cuando no me hace ninguna gracia lo he solventado en cuestión de pocos minutos, y sin que me doliera nada.
    El secreto está en la actitud, que no sé si tiene que ver con el Feng Shui o no, pero sí con el corazón.
    ¿Se puede poner corazón al simple hecho de limpiar un horno? ¡Sí, claro que sí!
    Y toda esa maldita grasa adherida es una lección de vida. La actitud es lo que manda, la actitud con que haces las cosas "convierte" a esas cosas en "otra cosa"...
    No es importante la cosa en sí, lo valioso es tu relación con esa cosa, con ese hacer. Y si tú danzas al hacer lo que haces, las cosas bailan contigo. Es magia, pura y simple magia.

    Nuestro problema, como seres complejos, con personalidades, caractéres y preferencias, es que sólo queremos hacer lo que nos gusta, y lo que no nos gusta se convierte en un infierno. Pero el mundo no está hecho a nuestra medida, obviamente, y entonces lo pasamos muy mal ante aquellas circunstancias que no entran en nuestro "campo positivo". Esto es un defecto nuestro, que tenemos que arreglar. Y el arreglo que yo veo es el de la danza.
    Todos venimos del agua, y el agua es la mejor de las bailarinas. Imitémosla en todo, intentemos ser como ella. Nos irá mucho mejor.

    La próxima vez que tengas que limpiar el horno, pregúntale al I Ching, a ver qué te dice. O mejor, simplemente límpialo, con la sensación de que no se va a hundir el mundo ni estas perdiendo el tiempo en algo ingrato, sino que estás haciendo algo necesario, que hay que hacer. Olvídate de tus gustos, olvídate de ti. Simplemente, límpialo.
    El horno va a quedar como "los chorros del oro", y tú también.

    Y si no te vale mi consejo de viejo, también le puedes decir a la asistenta que lo limpie, jejeje. ¿O ya la has despedido? En ese caso, usa la primera opción.

    Un abrazo, querida Cristal.

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  50. Hola, Leal.
    La armonía en nuestro derredor es muy necesaria para vivir 'armónicamente', pero no podemos estar a expensas de que esa armonía esté presente o no. Porque entonces siempre seremos como "hojas de otoño barridas por el viento".
    Según mi punto de vista, lo que tenemos que intentar es ser armónicos nosotros mismos. Desde esa armonía personal creo que es más fácil encontrarnos con armonías externas. Si somos 'armónicos' interiormente, el posible caos que nos encontremos afuera será recibido y encajado de otra manera.
    Es mi forma de verlo, ya digo.

    Lo del comentario que hice en tu sitio se me quedó corto, la verdad. Es un tema importante que se merecería un escrito más extenso y concreto. Quizá lo haga. No es el tipo de temas que me gusta abordar, pero creo que hay que dar voz a esas cosas "políticamente incorrectas" que muchos pensamos y nos callamos.

    Un abrazo, amiga, y espero que tu familiar ya esté bien.

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