Aquí escribo,
al filo de la noche,
en este cuaderno de cristal
y humo,
para ahuyentar las sombras.


Con la ventana abierta,
por si viene el pájaro
del sueño.

AMB







jueves, 19 de agosto de 2010

Su sombra y la mía




Nuestras conversaciones transcurrían como una corriente de aguas azules en la que brillan aquí y allá las arenas doradas, y nuestra calma era como la calma de las cimas, de esas alturas espléndidamente solitarias, muy por encima del espacio de las tormentas, donde sólo el aire divino murmura todavía en la frente del audaz viajero.
Y luego la maravillosa, la santa tristeza, cuando sonaba la hora de la separación en medio de nuestro arrobamiento, y yo exclamaba: "¡Ahora volvemos a ser mortales, Diótima!", y ella me decía: "¡La muerte es apariencia, es como esos colores que centellean en nuestros ojos cuando hemos mirado mucho tiempo al sol!"

Friedrich Hölderlin
("Hiperión")

... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ...


Los dos amigos se sentaron sobre la hierba, para descansar de su largo camino por la orilla del río. Detrás de ellos susurraban los álamos blancos, cuyas hojas danzaban con una fresca brisa que venía del oeste. Y en el horizonte, sobre una loma cubierta de olivos, se veía la despedida del sol, dorada, alegre, sonriente, como una puerta hacia el país del sueño, como una gran ventana abierta al infinito.
Había una música en el ambiente de aquella tarde de agosto, una música dulce y animosa que tocaba el corazón, como un violín de aire que bajara de las nubes para acariciar la tierra, y encantarla. Pero sólo uno de ellos la escuchaba...

- ¿Tanto la quieres?
- Mira, amigo, cuando estoy con ella el mundo está completo, no falta nada. Ella lo llena todo.
- Típica impresión del enamorado...
- Jose, estoy enamorado, sí, pero no soy un loco adolescente que se deje cegar, mi experiencia es un grado, los fallos acumulados no restan lucidez sino que la enriquecen. Y puedo decir, desde la sensatez, que por fin he encontrado a la mujer de mi vida, la que siempre soñé.
- ¿Estás seguro de eso?
- Lo estoy, como nunca antes.
- Antonio, nos conocemos desde hace mucho tiempo, y tus palabras me suenan a repetición.
- Jose, hablo desde el sentimiento, y mi sentir ahora es éste. Claro que ha habido un pasado, pero eso ahora no cuenta, mi presente es ella y creo no equivocarme si digo que es la mujer que soñé.
- Bueno, siempre se sueña con un cierto modelo de mujer.
- No, amigo, los modelos varian con el tiempo, como en un desfile de años, pero ella..., ella es el original.
- ¡Jajaja! Cómo exageras.
- Si al menos escucharas la música...
- ¿Qué música?
- ¿Ves? No escuchas, por eso no puedes entender.
- Lo único que entiendo es que estás loco por ella, y además que...
- ¿Qué?
- Que ya veremos lo que dura.
- Eso no puedo saberlo, ni ella tampoco, pero... ¿es menos bella una rosa porque se marchite en invierno? ¿Cuánto dura la vida de una mariposa?
- Pues no sé, muy poco.
- Así suele ser el amor, frágil y transitorio como una flor o una mariposa, pero a veces, sólo algunas veces, perdura en el tiempo, y eso sucede cuando se ha cruzado el puente.
- Perdona, no te entiendo, ¿qué puente?
- El puente que une a dos almas, a pesar del tiempo y la distancia.
- Antonio, perdona que te diga esto, pero creo que estás un poco loco. Ya se te pasará, espero.
- Sí, nací loco, y hoy, ya viejo prematuro, estoy más loco que nunca. Por eso he podido cruzar ese puente.
- ¡Jajaja! Lo que decía, estás loco.
- Sí, cierto, y ella también lo está, eso es lo que nos une.
- Me preocupas, Antonio.
- Pues deberías alegrarte.
- ¿Alegrarme porque te metas en una aventura que no sabes dónde te llevará? Me parece todo tan inseguro...
- Ese precisamente es el concepto de aventura, ir hacia el horizonte sin saber qué te vas a encontrar.
- ¿Y eso te parece bien?
- Eso es para mí la vida.
- Pero...
- Pero nada, sin aventura no es posible el descubrimiento.
- ¿El descubrimiento de qué?
- Del tesoro.

El sol ya se había ocultado tras el horizonte, y poco a poco empezaron a verse estrellas. Aún faltaba la luna, pero ya vendría. Todo viene cuando tiene que venir.

- Vale, Antonio, te concedo que estés enamorado, eso lo puedo entender, pero... no sé, somos amigos y me gustaría verte más consciente.
- ¿Consciente? Te aseguro que lo soy.
- Pues yo no te veo así. Me hablas de aventuras, de tesoros...
- Sigues sin escuchar la música.
- Esa música la oyes tú, porque estás alucinando.
- Sí, en colores, verde esmeralda y azul de anochecer.
- ¿Nada más?
- También conservo el ámbar del sol, y espero el blanco de la luna.
- Definitivamente, estás loco, jajaja.
- Ríete, amigo, ríete, que yo me río aun más.
- No oigo tu risa.
- Me río por dentro.
- Antonio, esa sonrisa... ¿a qué viene esa sonrisa?
- Viene a que escucho la música que tú no escuchas, viene a que el violín del aire me dice que ella me ama...
- ¿Y eso?
- Y si ella me ama, es que la misma vida me quiere, nos quiere, y esa es la conjunción del universo.
- Perdona, pero ¿qué tiene que ver el universo con esto?
- Amigo, a esto se le llama armonía. Es muy rara entre humanos, pero a veces surge.
- ¿Armonía?
- Sí, aunque yo prefiero llamarlo "magia".

Uno de ellos, el llamado Jose, se quedó como meditabundo, sin decir palabra, y mientras tanto apareció la luna por el sureste, grande, espléndida, y todo el camino adquirió un tono marfil que convertía la escena en una especie de sueño. Ahora la brisa soplaba con más fuerza, sin llegar a ser viento, agitando suavemente las copas de los árboles y peinando el espejo del río.

- Jose, ¿te encuentras bien?
- Sí, estaba pensando.
- ¿Y en qué pensabas, si puede saberse?
- Pensaba en que me gusta lo que te pasa, y que envidio sanamente tu situación. No es una situación lógica ni racional, pero...
- ¿Pero qué?
- Que me gustaría sentirla también, y escuchar como tú ese violín de aire.
- ¡Bien!
- Antonio, no puedo razonar tu sentimiento, pero, de alguna forma, lo añoro.
- Amigo, no pienses más y mira a la luna.

Y eso hizo. La luna estaba llena y miraba al mundo con su gran ojo blanco, prendado de sueños. Jose fijó sus ojos en ella, intentando no pensar en nada, sólo observar, sólo mirar, sólo sentir... Y la luna le miró, y le sonrió.
Algo extraño le sucedió en ese momento, porque inesperadamente empezó a sentir el roce de la brisa, a la que antes no había prestado atención, y él también sonrió.

- Antonio, amigo, creo escuchar a lo lejos ese violín de aire...
- Bien, ¿me comprendes ahora?
- Sí, y te deseo lo mejor en esa relación.
- Gracias, amigo. ¿Ves esas dos sombras alargadas de los álamos que hay enfrente, en la orilla del río?
- Sí.
- Pues esas son su sombra y la mía.


Antonio H. Martín

(19 de agosto, 2010)


________________________

imágenes:

1- Su sombra
2- Su sombra y la mía

24 comentarios:

  1. Realmente es cierto, cuando alguien te ama, un universo te ama.
    Enhorabuena!
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Gracias, MJ.
    Sí, así es, amiga. Uno sigue siendo consciente de todo, no se vuelve tonto, pero... todo sabe distinto, la luz se ve de otro color y hasta el aire huele de otra manera, más dulce e intensa.
    Cosas del amor, que parece que transforma o nos transforma.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Hola, Juan.

    Escueto comentario el tuyo, jeje, pero gracias por tu visita y tu saludo.
    Ya he visto que andas haciendo picnic en el estacionamiento de autos, con olivas negras y una buena conversación...

    Un abrazo hasta el ombligo de la luna.

    ResponderEliminar
  4. La pasión puede durar más o menos, puede ser ininterrumpida o intermitente, pero es energía vital y creativa. El deseo en su sentido más amplio, es lo que nos mueve y promueve la aventura de vivir.
    Me alegro por este maravilloso sentimiento y os deseo lo mejor, del fondo de mi corazón.

    ResponderEliminar
  5. Gracias, amiga Gárgola.

    Hay quien dice que la pasión es el origen del universo, así que fíjate si es "vital y creativa".
    La aventura de vivir está indisolublemente unida al deseo. Es lo que tiene la fuerza de la vida, que quiere vivirse. Y todo lo demás son "gaitas", sombras grises, vacías, que no van a ninguna parte, porque les falta la conexión con el corazón de la misma vida.
    Tu alegría se une a la nuestra, así que de nuevo ¡gracias!

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. La luna te sonríe, y tal vez incluso su sombra.

    Un abrazo, Antonio.

    Salut

    ResponderEliminar
  7. Así es, Salut, la luna nos sonríe, y su sombra... su sombra es donde guarda los secretos, y puede que de ahí haya salido este hechizo de vida.
    En cualquier caso, sea de donde sea y venga de donde venga, estamos juntos y encantados, y eso es lo que importa.

    Un abrazo, poeta.

    ResponderEliminar
  8. Está muy bonito tu Relato.
    Y lo que más me gustó fueron las imágenes: cómo un par de sombras forman UNA SOLA. Excelente modo de ilustrar este fenómeno universal del Amor.

    Un abrazo, doble y uno

    ResponderEliminar
  9. Sí, estimada Liz.
    Dos sombras juntas se vuelven una. Lo importante es que están juntas porque así lo quieren, y de esa unión sólo puede brotar luz.
    ¿Luz de una sombra?... Pues sí.

    Un gran abrazo para ti.

    ResponderEliminar
  10. Pues mi querido amigo, el amor es así de... CON TUN DEN TE..

    Contiene una íntima certeza tan fuerte, que hace que uno se despierte... has usado bien la palabra 'consciente' ;)

    Esas sombras entrelazadas son una maravilla... Son como los caracteres con que el destino unió sus nombres desde mucho antes de conocerse.. o re-conocerse..

    Y déjame decirte que aplaudo y me siento feliz por tu lucidez y por esta maravillosa etapa de tu vida, porque solo en el presente es posible el amor. Eso es algo que creo con absoluta convicción... El pasado y el futuro se revelan como la ilusión que son cuando la luz del presente lo invade todo. Cuando uno está enamorado, despierta al presente.. es como que está 'presente' siempre, en el presente ;)

    Que sus sombras sigan caminando juntas... Que se abracen al caer la tarde y que se reencuentren siempre... cruzando todos los puentes que tengan que cruzar..

    ¡Me siento muy feliz por ti querido amigo!!! Creo que has encontrado a tu PAR... Cuando yo encontré al mío ;) supe que estaba escrito... sentí cómo el universo se estremeció y vi a las estrellas formar la constelación bajo la que habría de darme el primer beso...

    Y lo supe porque fue.. CON TUN DEN TE ;)

    El universo entero conspiró para que nos encontráramos.. Y sé que te ha pasado lo mismo ;)

    feliz presente amigo mío... felicidades a los dos ;)

    ResponderEliminar
  11. Entonces volveré a mirarte sorprendido, escuchando
    Como otrora
    el dulce canto, las voces, los acordes del laúd,
    y más allá del arroyo la azucena dorada
    exhalará hacia nosotros su fragancia.
    .../...

    ¡sé bien venido, mundo de las sombras!
    Feliz estoy, así no me acompañen
    los sones de mi lira, pues por fin
    como los dioses vivo, y más no anhelo.

    Friedrich Hölderlin.

    ResponderEliminar
  12. "Dentro de un mundo de conocimiento y misterio, cada uno elige su camino. Y aunque parezca que no va a ninguna parte, ése es el sendero que debe seguir, porque es el que para él brilla en medio de las sombras." AHM 29/08/09 (Mi bosque)
    Me alegra saber que estás en el camino amigo. ¡Suerte y sigue escuchando atento!
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  13. Bella imagen que refleja maravillosamente el momento de plenitud que estás viviendo.

    Disfrútalo todo lo que puedas, no importa lo que dure.

    Un abrazo fuerte, Antonio.

    ResponderEliminar
  14. Precioso Blog, volveré con tu permiso.
    Un beso
    Nela

    ResponderEliminar
  15. Jajajaja...He tenido un déjà-vu con tu diálogo, sólo hay que cambiar amigos por amigas y lo demás casi es un calco. ¡En fin! que me alegro que ambos estemos viviendo algo similar, que nos seamos nada originales y que nos hagan las mismas preguntas y respondamos casi igual :-)))

    Un beso mi polemista canallita.

    ResponderEliminar
  16. El amor es la llave de las sombras y en lugar de sumarlas, las alarga, hasta llenar un solo cuerpo con sus almas.

    Cuerpo que compones cuando cantas. Enhorabuena Antonio, alma siempre enamorada.

    ResponderEliminar
  17. El amor es así de contundente, ¡sí!

    Sí, amiga maga Isis, sí. El amor es una ola de presente que te inunda y a la vez te abre los ojos, es como un íntimo abrazo de la vida.
    Quiero estar enamorado ¡siempre!, jeje.

    Gracias, Isis, un abrazo.

    ResponderEliminar
  18. Hola, "una sombra".

    Muchas gracias por esa cita de Hölderlin, que imagino pertenece a su Hiperión.
    La verdad es que así es como me siento. No es que viva como los dioses, pero la cosa se acerca bastante cuando estoy con ella.

    ¿Te he dicho hoy que te quiero, sombra?

    Un beso.

    ResponderEliminar
  19. Hola, Cristal.

    Eres mi lectora fiel, y sacas frases de este cuaderno que ni siquiera recuerdo, ¡gracias!

    Sí, siento que estoy en el camino. Seguiré escuchando.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  20. Gracias, Cristal - Tocaya.

    Haré eso que dices, vivir y disfrutar el presente. De hecho ya lo hago, y no me importa lo que dure, lo importante es que ese brillo ha surgido en mi vida, en la de ambos, y desde entonces el camino tiene una luz diferente.

    Un abrazo, Cristal.

    ResponderEliminar
  21. Gracias, Nela.

    Por supuesto que tienes mi permiso, vuelve cuando quieras.

    Besos.

    ResponderEliminar
  22. Hola, Malvada.

    Lo de menos es ser original, porque lo que importa es ese sentimiento que te llena. ¿Qué más da la forma de expresarlo? El caso es poder hacerlo, tener un motivo real para ello.
    Yo también me alegro de que estés viviendo "algo similar". Estamos colgados de nubes distintas, lejanas, pero con el mismo rumbo, en el mismo cielo, nubes que viajan hacia el mismo horizonte, que es el encanto de amar y ser amado.
    ¿No es esto una maravilla?

    Un beso, Bruja, y que te vaya de lo mejor en tu aventura de vida.

    ResponderEliminar
  23. Eli, el amor es la llave de las sombras, como dices, pero también es la llave de plata que abre la puerta de los sueños.

    Gracias por tus palabras. Un abrazo.

    ResponderEliminar